En su intervención durante el Foro Hiria dedicado al emprendimiento, Mikel Irujo, consejero de Industria y de Transición Ecológica y Digital Empresarial del Gobierno de Navarra, destacó el valor del ecosistema industrial y emprendedor de la comunidad foral, subrayando la visión integral que recoge el borrador de la nueva Ley Foral de Industria. Según explicó, en Navarra se entendía la industria no solo como la capacidad de “hacer cosas”, sino como un entramado complejo en el que “convergen elementos esenciales como la financiación, los servicios, la formación, la innovación diaria y el emprendimiento”. Todo ello conforma, a su juicio, “el verdadero tejido industrial del territorio”.

Irujo destacó que “Navarra ofrece un ecosistema de innovación robusto, sustentado en sus centros tecnológicos, en un sistema formativo potente y actualizado, y en la estrecha conexión entre universidades y economía”. Mencionó el papel clave de las tres universidades presentes en Navarra y la calidad de su sistema de formación profesional dual, considerado uno de los más prestigiosos de Europa. A esto se suma, añadió, una potente infraestructura de apoyo al emprendimiento, representada especialmente por la sociedad pública CEIN.

El consejero calificó a CEIN como el “brazo ejecutor del emprendimiento” del Gobierno de Navarra y puso en valor su trayectoria. Desde su creación en 1991, por sus instalaciones habían pasado 273 startups, generando más de 1.200 empleos directos. Uno de los datos más relevantes que ofreció fue la elevada tasa de supervivencia de estas empresas: el 83% seguían activas tras varios años, lo que situaba a Navarra en el top 3 europeo en cuanto a consolidación de empresas emergentes durante las últimas décadas. Esta cifra, según Irujo, demuestra que “el sistema navarro de emprendimiento funciona bien, aunque siempre es necesario mejorar”.

Irujo también destacó el modelo de colaboración existente entre CEIN y el resto del ecosistema: universidades, centros de formación profesional, entidades financieras y empresas. Todo esto formaba parte de una estrategia industrial conjunta donde el emprendimiento se concebía como uno de los pilares fundamentales. Mencionó también la implicación de Sodena en la financiación, a través de capital semilla y en colaboración con otros agentes financieros, facilitando así el complejo camino de los emprendedores.

El consejero reconoció que emprender es una tarea difícil, en la que la persona emprendedora debe asumir múltiples roles —desde dirección financiera hasta ventas—, pero valoró muy positivamente el acompañamiento que CEIN ofrece en ese proceso. Subrayó la profesionalidad y compromiso del equipo humano de la entidad, “lo que contribuye en gran medida al éxito de las iniciativas impulsadas desde allí”.

En la parte final de su intervención, Irujo expresó cómo estos encuentros con emprendedores “resultan especialmente inspiradores para él como político”. Afirmó que, pese a los numerosos obstáculos que enfrentaban, “las personas emprendedoras tienen una convicción firme en sus proyectos y en su capacidad para mejorar la sociedad”. Ese compromiso con una idea clara y con el bien común, aseguró, era lo que hace del emprendimiento un motor transformador.

Cerró su intervención agradeciendo a todas las personas implicadas en CEIN y a quienes lideraban proyectos empresariales desde Navarra. Reafirmó, además, el compromiso del Gobierno foral con el fortalecimiento continuo del ecosistema emprendedor navarro.