Vuelve el factor Anaitasuna

Dani Zurdo trata de zafarse de su marca. Unai Beroiz

Osasuna Magna doblegó la noche del viernes al Santa Coloma en otro sobresaliente partido de los de Imanol Arregui en Anaitasuna, que siempre tuvieron un punto más de intensidad que los catalanes y el marcador estuvo condenado a premiarlo (2-0).

Ya desde el inicio, los verdes quisieron ser los que fueran a por el partido. La primera ocasión nació de una pared entre Juninho y Linhares, cuyo disparó repelió Borja Puerta. En otra gran oportunidad, el propio Linhares lo volvió a probar, pero esta vez la madera fue la que rechazó el lanzamiento. Los de Imanol Arregui insistían en campo rival, tanto que Carlos Vento, que volvía a competir tras una lesión en su rodilla izquierda, lograba convertir el primero tras un rechace sin dueño en la frontal (1-0). Industrias Santa Coloma respondía en la siguiente jugada con un disparo potente, pero Asier, que cumplía 300 partidos con el conunto de Irurtzun, despejó sin problemas.

Era el turno del Magna. Linhares, siempre incisivo por banda izquierda cuando disponía del esférico, aprovechó esta aptitud para superar a su defensor y definir cruzado con un disparo raso. Era el minuto 10 y en el marcador ya irradiaba el 2-0.

Tras sendos golpes, los de Xavi Closas trataron de hilar jugadas en ataque para controlar el encuentro y generar peligro sin arriesgar de más, pero no lograban crear oportunidades manifiestas.

En la última jugada del primer acto, Fabinho lo probó desde el costado izquierdo con un durísimo lanzamiento desde el costado izquierdo. Puertas, muy atento, blocó a córner a escasas décimas del intermedio.

Tras el descanso, Asier fue el primero que destacó sobre el 40x20. Tuvo que emplearse a fondo para despegar un disparo de Corso desde 10 metros. Justo después, Toni lo probó con un zurdazo desde la banda izquierda directo a la cruceta.

En el minuto 23 llegaría la jugada polémica del choque, cuando David Álvarez parecía sacar un disparo de Toni en la línea de gol con el brazo. Todo el equipo protestaba junto a los pitidos de desaprobación del pabellón entero, pero el colegiado no decretó el disparo desde los seis metros.

Restaban cinco miuntos para el final, y el Santa Coloma, con muy poco que perder, arriesgó todo en busca de reducir distancias. Corso jugaba de portero jugador para ganar efectivos en ataque, pero el Xota, bien encerrado atrás, estuvo a punto de sentenciar a la contra por medio de Juninho y Linhares.

Imanol Arregui sigue exprimiendo todo el jugo posible a sus pupilos, que demostraron ante 1.735 aficionados un excelente juego con el que la salvación es más que posible.