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ESPAÑA Juanjo, Kike, Aicardo, Alemao y Fernandao (cinco inicial), Ortiz, Torras, Alvaro, Borja, Lin, Sergio Lozano y Miguelín.

RUSIA Gustavo, Prudnikov, Sergeev, Pula y Cirilo (cinco inicial), Pereverzev, Chistopolov, Eder Lima y Robinho.

Goles 0-1, min.2: Cirilo. 1-1, min.4: Ortiz.

2-1, min.14: Fernandao. 3-1, min.19: Sergio Lozano. 3-2, min.34: Alemao, en propia puerta.

Árbitro Marc Birkett (ING) y Gabor Kovacs (HUN). Amonestaron a Kike, Lin, Torras y Juanjo, por España, y a Eder Lima, Cirilo y Robinho, por Rusia.

Estadio Nimibutr, Bangkok.

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madrid. La selección española de fútbol sala se clasificó ayer con brillantez y sufrimiento para las semifinales del Mundial que se está disputando en Tailandia tras derrotar en un apasionante partido a Rusia por 3-2. España se amparó en su magnífica primera parte. Siguiendo los ejemplos de Brasil e Italia, se abonó a remontar, aunque tan sólo un tanto en contra, y luego apabulló a su rival, al que minimizó en el primer acto, endosándole tres tantos cuando no había recibido ninguno en los anteriores 160 minutos. En cambio, luego tocó sufrir. Su rival apretó el choque y el marcador y encerró a los españoles, que aguantaron en pie gracias sobre todo a la aparición de Juanjo, que se consagró en un partido de nivel y permitió el pase a las semifinales de este viernes por quinta ocasión consecutiva, donde espera otro enemigo de cuidado, Italia.

Las cosas no comenzaron bien porque Rusia abrió el marcador con poco más de un minuto de partido tras pillar desprevenida a la defensa en un córner. Su solidez defensiva se presentaba como un obstáculo de magnitud para los de José Venancio López, pero estos encontraron el empate en una combinación con Fernandao. El último en recibir fue Carlos Ortiz, que tuvo el inesperado honor de acabar con la imbatibilidad de Gustavo. A partir de ahí, Juanjo vivió con cierta tranquilidad, con España recetando su medicina defensiva a su rival. Los rusos se resquebrajaron, pero solo fueron castigados por el psicológico tanto de Sergio Lozano al filo del descanso y que confirmaba la superioridad española. Juanjo había pasado unos primeros 20 minutos relativamente tranquilos, pero su calma acabó en la reanudación. El portero murciano se convirtió en clave para frenar los numerosos ataques de Rusia, con paradas de mérito.

Los de Sergey Skorovich salieron impetuosos y apoyados en el talento de sus brasileños se hicieron con el mando del balón, acertando a controlar al combinado español, que vio con menos asiduidad la portería de Gustavo. Los árbitros anularon con polémica un gol a Torras y los rusos se volcaron con todo en busca de que la diosa Fortuna les devolviese lo que les quitó hace nueve meses, pero Juanjo se encargó de confirmar otra amarga derrota a los subcampeones continentales.