El Promesas gana y huye del descenso
la tercera victoria a domicilio, conseguida en teruel, saca del pozo a los navarros por primera vez
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TERUEL Bodo; Durán, Soria, Sidibe, David; Monforte, Arcega (Mitogo, min.73), Nacho Gómez, Parada; Gallego (Richi, min.54), Trujillo.
OSASUNA PROMESAS Elías; Trujillo, Unai, Ekhi, Eslava; Eguizabal, Hugo, Carnicer, Javi Fernández (J. Galán, min,61); Marc Nierga (X. Galán, min,87), Omar (Guadaño, min.89).
Gol 0-1, min.70: Omar.
Árbitro Díez Cano (castellano-leonés). Mostró tarjetas amarillas a Trujillo y Nacho Gómez y al osasunista Trujillo.
Estadio 600 espectadores en Pinilla.
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TERUEL. Osasuna Promesas sumó en Teruel su tercera victoria consecutiva a domicilio tras las cosechadas ante Izarra y Alavés y abandona los puestos de descenso por primera vez desde la tercera jornada liguera. Parece que a los de Miguel Merino le sienta bien salir de Tajonar, ya que toda la suerte que les falta en el coliseo osasunista les acompaña cuando viaja fuera. Ayer, un solitario gol de Omar en la segunda parte bastó para vencer. Antes, el partido había discurrido por los derroteros de la igualdad; con alternativas por parte de ambos conjuntos y la compartida falta de puntería en ataque.
El Promesas salió a controlar el juego desde el principio del choque, pero el Teruel también quiso la pelota y por eso el partido se convirtió en un correcalles de un lado a otro. En esa tesitura, el filial rojillo se encontró muy cómodo. En gran medida, porque con las líneas muy juntas apenas concedió espacios arriba al Teruel.
Un par de acercamientos de Gallego y Trujillo fue todo el bagaje ofensivo del cuadro turolense en la primera parte. Las dos veces, el remate final se perdió por encima de la portería de Elías. Por Osasuna, brilló con luz propia Ekhi en el primer acto. El de Barañáin fue un baluarte para la zaga osasunista. Marc Nierga también puso en apuros a la defensa local con su movilidad, pero el tiempo pasaba y los rojos tampoco eran capaces de crear ocasiones claras a pesar de llevar peligro al contragolpe a la meta local.
Tras el paso por vestuarios, la decoración del partido no varió. El Teruel llevó la iniciativa en los primeros minutos, pero con el paso del tiempo se fue apagando. Lo vio Merino e introdujo en el campo a Jorge Galán por Javi Fernández. Y la jugada le salió redonda al técnico rojillo, ya que escasos minutos después llegó el gol osasunista tras una indecisión de la zaga del Teruel que aprovechó Omar para subir el cero a uno al marcador. Era el premio a la valentía.
A partir de ahí, el filial se empleó a fondo en defensa. Se juntó todavía un poco más y el trabajo en equipo hizo el resto. El Teruel pasó entonces a controlar el balón, pero los de Embela fueron un querer y no poder. Los nervios atenazaron al conjunto turolense y el Promesas sumó su tercera victoria consecutiva a domicilio. En todas, el conjunto osasunista se ha impuesto por 0-1. Algo querrá decir. Pero el caso es que, ahora sí, el filial vuelve a soñar con la permanencia. Si es que había dejado de soñar. Porque otra cosa no, pero de fe va sobrado este equipo.