PAMPLONa - El Club Atlético Osasuna ha presentado una reclamación de cantidad contra el futbolista Mamadou Koné y de forma subsidiaria, es decir, en caso de que el jugador no pueda responder, contra su club, el Racing de Santander debido al incumplimiento del contrato que firmó hace más de un año el delantero costamarfileño con el club navarro. Osasuna reclama una indemnización de 12 millones de euros por los daños y perjuicios causados. En realidad ese contrato, que unía al ariete por cuatro temporadas con la entidad rojilla, nunca llegó a ejecutarse porque la Liga de Fútbol Profesional permitió que Koné, que alegó que no había rubricado ningún contrato en documento original con Osasuna, se inscribiera como futbolista del Racing de Santander tras haber quedado como agente libre. La propia LFP, aunque admitiera los documentos presentados por Koné y la entidad cántabra, ofreció a Osasuna en su día la posibilidad de que ejerciera las acciones civiles correspondientes para denunciar al jugador por incumplimiento de contrato.

Dicha acciones se han ejercido y se dirimirán finalmente en la vía judicial de lo Social (es decir, los juzgados donde se resuelven los pleitos laborales). El Juzgado de lo Social ya ha admitido a trámite la demanda interpuesta por Osasuna y ha citado a las partes implicadas para un juicio en una sala de vistas del Palacio de Justicia de Pamplona.

Conviene recordar que Osasuna estuvo esperando esta misma temporada hasta el último momento la llegada de Koné, confiando en que el contrato del delantero y su representante, Rodri, de Promosport, se iba a respetar. Sin embargo, todo saltó por los aires y el propio jugador rompió con su agente y se quedó en el Racing.

Ya era su segunda marcha atrás a incorporarse a las filas rojillas, puesto que ya en enero del año pasado, cuando Osasuna jugaba en Primera División, Koné ya había tenido la posibilidad de llegar a Pamplona. Por entonces, Koné había acudido a los juzgados para desligarse del Racing de Santander por impagos pero luego se echó para atrás y dijo que se quedaba allí para ayudar al club. Su intención no fue otra que la de no ser ya demandado por el Racing debido a la rescisión unilateral del contrato que les vinculaba hasta junio. La semana pasada, salió a la palestra la intención de Koné de marcharse del Racing al Betis. - E.C.