El Juzgado de Instrucción número 4 de Pamplona ha condenado a sendas multas de 120 euros por un delito leve de lesiones a dos jugadores del Trofeo Boscos que agarraron y agredieron a un árbitro, al que dieron un puñetazo, al término de un encuentro de la competición de fútbol campo. La sentencia recoge además que ambos futbolistas, que ya fueron inhabilitados por la organización del Trofeo con cinco años de sanción, tendrán que indemnizar conjunta y solidariamente al colegiado, Álvaro Sádaba, por las lesiones sufridas que le mantuvieron de baja laboral más de dos meses.

El juez considera probado en su resolución que sobre las 21.15 horas del 5 de noviembre de 2022, al término de la disputa de un partido de fútbol, dos jugadores del mismo equipo habían golpeado al colegiado. Uno de ellos lo sujetó y le propinó dos puñetazos y una patada, mientras que el otro jugador le sujetó y le causó varias lesiones. El árbitro sufrió molestias en la apertura de la articulación temporomandibular y heridas en la mejilla y en el labio, que curaron sin necesidad de tratamiento en 40 días durante diez de los cuales tuvo un déficit especial de calidad de vida.

Para llegar a tal conclusión, el juez ha tenido en cuenta que, aunque las declaraciones de ambas partes (agresores y víctima) "son contradictorias", los dos encausados reconocieron parcialmente los hechos durante el juicio y uno admitió haber propinado un puñetazo y el otro haberle sujetado, aunque dijera que era para defenderse. La sentencia también recuerda que un testigo presencial de los hechos detalló la agresión.

Se da la circunstancia de que los dos agresores habían sido expulsados a lo largo del encuentro. Uno es un jugador de campo al que el colegiado le mostró la tarjeta por una entrada sobre un rival y el otro es el portero que fue a recriminar la expulsión de su compañero y que también acabó expulsado. El árbitro recordó que ambos se mantuvieron en las instalaciones, increpándole y amenazándole, y que, al concluir el partido, consumaron la agresión. El trencilla acudió posteriormente a un centro hospitalario y presentó una denuncia en la Policía Nacional. La organización del Trofeo Boscos, a la hora de sancionar los hechos, ya expresó en un comunicado que “rechaza este tipo de comportamientos que, además, merecen la mayor sanción tal y como figura en sus Reglamentos”. "El colectivo de árbitros es básico para el buen funcionamiento del trofeo Boscos. Al igual que el resto de participantes (directivos, jugadores, delegados…) los árbitros cumplen con su difícil responsabilidad de la mejor manera posible. El árbitro es el juez imprescindible que facilita que el resultado final en cada partido sea el más justo".