El dato no tiene valor estadístico, porque haría falta una muestra mucho mayor que los 13 casos que ha habido hasta ahora, pero convendrán con nosotros en que no es muy normal que en 13 temporadas con promoción de ascenso a Primera (ya saben: semifinales de 3º contra 6º y 4º contra 5º, y final), solo tres veces ha subido el 3º, pese a haber sido el mejor de los cuatro en la liga y pese a la doble ventaja de acabar en casa sus eliminatorias. Y no menos curioso es que sea el 6º el que más veces lo ha logrado (5), cuando se le supone el peor y además juega fuera de casa los partidos de vuelta. ¿Será quizás porque el Eibar (3º) se siente más obligado a subir que el Oviedo (6º) y es una presión difícil de llevar? Otra tesis distinta también circula por ahí: sube el que llega a la promoción con trayectoria más ascendente. Y en eso gana el Sporting (5º), con 9 puntos en sus cuatro últimos partidos. Emocionante la promoción. Y agónica.