PABLO Berasaluze y Jon Ander Albisu empezaron mal el campeonato y en el quinto partido me pidieron que fuera su botillero. De hecho, tengo mucha confianza con Pablo, con el que incluso coincidí en mi etapa como pelotari profesional, y me animé. Mi estreno fue en Mungia, donde Pablo y Jon Ander jugaron contra Gonzalez y Zubieta. Y ganaron. Pero lo más importante es que hubo feeling entre nosotros y seguimos para adelante. Después Pablo me comentó que me pusiera de botillero fijo con ellos y así lo hemos hecho hasta ahora. Me lo han pedido y yo estoy encantado. Es más, va a ser mi primera final desde la silla.

No creo que yo sea el secreto de que hayan llegado a la final. Pienso que el verdadero secreto está en la mano de Albisu. Mi papel consiste únicamente en transmitirles confianza y en que ellos sepan que pueden contar conmigo para cualquier cosa, para cualquier consejo.

No ha sido fácil para Berasaluze II y Albisu llegar hasta donde han llegado. Han sufrido mucho durante todo el campeonato, pero creo que alcanzan la final en su mejor momento. Y tienen que aprovecharlo para tratar de ganar. Se trata de una oportunidad inmejorable.

Pablo y Jon Ander no tienen secretos. Todos les conocemos bien. Lo complicado es contrarrestarles. Por ir un poco más lejos, diría que el remate de Pablo quizá sea el más fino de todo el cuadro profesional. Es un pelotari que esconde mucho la pelota. Pablo representa la habilidad; e Irujo, la fuerza. La duda que me queda reside en si hoy ganará la habilidad o la fuerza.

La pelea en la zaga también aparece igualada, pero creo que Irujo y Zabaleta irán a por Albisu. Son dos grandes pegadores y pueden castigar al zaguero rival. En nuestro caso, no ocurrirá así, ya que Pablo no tiene la fuerza de Irujo, pero junto a Jon Ander suma un montón de cosas buenas que trataremos de explotar. Es importante dominar los partidos, pero lo más importante es rematar. El tanto. Y también la final.

Tengo la impresión de que Berasaluze II y Albisu están ahora mismo en su mejor momento. Es por eso que han conseguido llegar a la final. De hecho, lo demostraron en el último partido de la liguilla de semifinales, en el que derrotaron a Irujo y Zabaleta, un resultado que les permitió clasificarse para la final del campeonato. Creo que aquel fue uno de los mejores partidos que han hecho ambos contra rivales de tanta categoría.

Nuestra pareja afronta la final sin miedo. Tal vez el único temor que tenemos es el mismo que seguramente tendrán nuestros rivales. Me refiero a la juventud y la inexperiencia de los dos zagueros. Son dos pelotaris que se parecen un montón, pero que deberán templar mucho sus nervios. Seguro que se ponen nerviosos, pero todo dependerá luego de cómo vaya el partido. En mi caso, solo podré ponerme nervioso. No puedo hacer mucho más. Intentaré estar tranquilo para que ellos también lo estén. Y es que Pablo y Jon Ander forman una pareja que atiende a las explicaciones. A ver si les sirven.