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Más de 11.000 m3 de piedra sobran en el río en Baztan

se localizan en siete puntos que ocupan el cauce e impiden el paso normal del aguaAdemás hay otros varios parajes en Erratzu, Arizkun, Lekaroz, Irurita, Arraioz y Oronoz en el mismo estado

Más de 11.000 m3 de piedra sobran en el río en BaztanONDIKOL

elizondo. Un total de 11.270 metros cúbicos de piedras que se han acumulado durante décadas se calcula que se deben extraer del río Bidasoa (Baztan, a su paso por el valle) para facilitar el paso del agua, en siete puntos localizados en las localidades de Azpilkueta, Arizkun, Elbete y Elizondo. La acumulación de cantos rodados, a consecuencia principalmente de las riadas, ha convertido varios tramos del río en auténticos pedregales tanto que en épocas de estiaje el caudal apenas discurre por uno o dos metros de anchura y se puede vadear a pie sin mayor problema.

Los parajes más problemáticos se localizan en las proximidades de los puentes de Malkoa (Azpilkueta), Bergara, Elbete (junto a Errotaberri), en el meandro de Giltxaurdi de Elizondo donde el Ayuntamiento de Baztan proyecta crear un tramo del paseo fluvial, y en el de Kuartelekozelai o de Opoka, también en Elizondo. Pero además de estos hay otros varios lugares en Erratzu, Arizkun, Lekaroz, Irurita, Arraioz y Oronoz que presentan una problemática muy parecida.

En todos los casos, la acumulación ha producido una considerable disminución de la sección de paso bajo los puentes, lo que al mismo tiempo favorece la retención de arbolado y ramaje de gran tamaño que en ocasión de riadas desvía el agua a las orillas y causa desprendimientos y erosiones del terreno. Por ejemplo, en el puente de Malkoa de Azpilkueta las piedras se acumulan bajo los dos arcos, y otro tanto ocurre en el de Bergara, en Arizkun.

En la misma situación se encuentra el puente que conduce al molino Errotaberri de Elbete y al barrio de Berro, donde el agua apenas discurre por uno de los ojos que se encuentra casi cegado y en parte del ojo central. La peor situación en los siete parajes citados se registra en el meandro de Giltxaurdi, desde el puente de Asko o de Habans hasta el que antiguamente se conocía como "de Victoriano", donde se calcula que el pedregal ocupa unos 330 metros de longitud del río por unos 12 metros de anchura y en unos dos metros de espesor medio.

Y en el puente del antiguo cuartel de las guerras carlistas, el de Kuartelekozelaia o de Opoka, la situación no es mucho mejor ya que en tiempo de estiaje el pedregal ocupa todo el espacio existente entre el viejo aska (abrevadero) del ganado donde se derribó un lavadero hasta el lugar que ocupaba la presa que fue derruida. Aquí se calcula que las piedras han ocupado un espacio de 40 metros de longitud por 10 metros de anchura, con un espesor medio de 1,5 metros, y es con Giltxaurdi el tramo más humanizado y en peor estado.