Homenaje a Juliana Catalán y Conchita Fraile en Villafranca

tudela. A su llegada al club de jubilados, tras la misa en la parroquia de Santa Eufemia, los villafranqueses recibieron a las vecinas Juliana Catalán y Conchita Fraile como auténticas celebridades. Todos querían llegar hasta ellas para saludarlas y darles la enhorabuena por el homenaje que el Ayuntamiento había pensado para ambas en el último día de las fiestas. "Felicidades, estás guapísima", celebraba una vecina al reconocer a Fraile.

Después de los saludos iniciales, el vicepresidente del club, José Miguel Aguado, se dirigió a las homenajeadas, a quien describió como "dos personas ejemplares" y les deseó que alcanzaran "los cien años en plenas facultades". La alcaldesa, Mari Carmen Segura, junto al concejal de Industria, David Muñoz, fueron los encargados de imponerles un pañuelico rojo. También les regalaron dos ramos de flores y diversos detalles.

las homenajeadas Juliana Catalán, de 93 años, se mostró muy sorprendida por la buena acogida de los vecinos. "No pensaba yo esta concurrencia. Estoy muy emocionada y, aunque lo estoy pasando bien con todos los hijos y con la familia, me acuerdo sobre todo de quienes no están", se sinceró.

Por su parte, Conchita Fraile, soltera de 89 años, confesó que durante la misa oficiada por el párroco Alberto Áriz (y en la que las recordaron de forma constante) no pudo hacer otra cosa "más que llorar". A este homenaje también se sumaron los auroros de la localidad.