Tomás Aguado, alcalde de Murchante: "En Pamplona no nos escuchan"
Murchante, como otros municipios navarros, no escapa al azote de la crisis. Varios proyectos, ya aprobados, se encuentran paralizados por falta de presupuesto. Tomás Aguado (PSN) entiende que la situación económica es mala, pero lamenta que ni siquiera se les atienda
murchante. ¿Cómo está afectando la crisis a Murchante?
Está siendo mucho más dura de lo que parece. Muchos proyectos no se pueden realizar y el pueblo ya no crece como hace unos años, pero lo peor es ver que hay mucha gente en el paro, que desaparecen las ayudas y que muchos ciudadanos se encuentran en situación de renta básica.
Uno de los proyectos que está aparcado, por falta de presupuesto, es la reforma del cruce de Murchante.
A base de insistir mucho se consiguió que este año se aprobara de forma definitiva, sin embargo, desde el Gobierno foral me dijeron que se acometerá cuando haya presupuesto.
¿Es de prioridad máxima?
Por supuesto. Es un punto negro. No lo ha determinado el Ayuntamiento de Murchante si no Tráfico, por lo que no podemos estar satisfechos y tarde o temprano habrá que darle una solución. Entiendo que los problemas económicos puedan ralentizar los proyectos pero, en ningún caso, pasarlos por alto y eliminarlos.
El centro de día también está parado.
Está aprobado e incluso se iniciaron las obras de construcción por valor de 120.000 euros, pero se tuvieron que paralizar a la espera de una partida presupuestaria. Ahora desde Bienestar Social se preguntan si realmente Murchante necesita un centro de día y yo cada vez lo considero más necesario, ya que la población está más envejecida y si no pronto se van a tener que desplazar.
Murchante también reclama un nuevo polideportivo.
Es otro proyecto parado. Cada año introducimos en los presupuestos municipales partidas para mejorar, en la medida de lo posible, el actual. Además, ahora mismo en Pamplona no te escuchan si hablas de un proyecto así. Dada la situación económica que tenemos, ahora mismo en lugar de estar de Pamplona a 100 kilómetros parece que estamos a 5.000 o 6.000. Cuando vas a pedir y te reciben desde el departamento que sea, vuelves con la sensación de que por lo menos te han escuchado, pero cuando ya ni te escuchan te parece que estás lejísimos.
¿Le ha ocurrido muchas veces que no le escuchen?
No me han escuchado lo suficiente. La Ribera está un poco abandonada. Muchos no saben lo que pasa aquí, no lo saben al 100%. A mí me pasó con el centro de día, por eso les he invitado a que vengan a Murchante y se acercarán el día 25 para conocer. Después podrán hablar sobre la situación en la que estamos.
¿La Ribera debe tener mayor peso?
Una Ribera unida sería mucho más importante que hablar solo de Murchante, Ribaforada o Fontellas. Pienso que debería haber muchas más cosas mancomunadas porque así tendríamos mucha más fuerza. Cuando hablamos de mancomunar servicios se nos llena la boca, pero al final no lo hacemos. No quiero culpar a Tudela, pero es la capital ribera la que debe liderar este proyecto, en eso no tengo ninguna duda.
Cuando se presentó como candidato del PSN aseguró que la mejor virtud es una escucha activa de la ciudadanía. ¿Se cumple?
Cuando un vecino tiene un problema viene aquí y se le escucha. Pero creo que la escucha activa más importante es la de los colectivos. Considero que el buen funcionamiento en estos dos años se debe a que se ha escuchado a los colectivos y se coordina con ellos los eventos que proponen. La fuerza de Murchante, ahora mismo, no es el Ayuntamiento, son los propios colectivos ya que nosotros lo único que hacemos es respaldarles a la hora de desarrollar los proyectos que siempre han querido realizar. Son ellos los que proponen y son muy participativos. Muchos de ellos estaban parados y estancados, nosotros solo les hemos escuchado.
¿Qué diferencias hay entre el actual y el anterior equipo de Gobierno?
No se puede tener un Ayuntamiento muy presidencialista. Yo me encuentro muy bien rodeado, los concejales son muy participativos y eso facilita mucho la labor. Esta corporación es mucho más participativa que la anterior, de hecho, a mí no me dejaron participar en la anterior por diferentes motivos.
¿Qué herencia le gustaría dejar?
Unas cuentas saneadas y claras y que la ciudadanía pueda decir que se le ha escuchado. Por supuesto, también me gustaría dejar sensación de que Murchante está vivo, ya que yo me lo encontré muerto. Me gustaría dejar una multinacional y que en la localidad no hubiera paro, pero eso no puede ser. Yo ofrecí terrenos a Mercadona para que se instalara aquí, pero me contestaron que éramos un municipio muy pequeño. En eso soy consciente de que no se puede pelear con Tudela.
En lo que respecta a las cuentas, ¿cómo están las de Murchante?
Saneadas y así van a seguir. Nunca vamos a gastar más de lo que ingresamos. Ahora hay un parón en la economía que impide hacer grandes cosas, solo pequeñas inversiones para mejorar el pueblo. Tenemos algo más de 3 millones de presupuesto y no hay una gran partida de inversiones, todas son pequeñas para acometer arreglos.
Puede que el próximo año haya que destinar una gran partida a la construcción de un polígono industrial
Estamos pendientes de que el Gobierno aprueba el nuevo PGOU de Murchante en el que se incluiría la construccón de un polígono industrial en el término de Carrilabarca. Es prioritaria la creación de un polígono para medianas y pequeñas empresas. Su ubicación es estratégica, está muy cerca de la autopista, de la carretera y con precios asequibles para la pequeña y mediana empresa, no va a ser un macropolígono.