El palacio de Irisarri en Igantzi acogerá un centro vacacional

igantzi. El Centro Vacacional Palacio de Irisarri, cuya apertura se prevé en Semana Santa de 2014, implantará un innovador concepto de turismo rural que integra alojamiento, ocio, naturaleza y aventura. Dará empleo directo a entre 20 y 30 personas y promoverá, según estimaciones, unos 150 puestos de trabajo indirectos. Esos fueron los datos que dieron ayer miembros de la familia Carrillo, natural de Irún y vinculada a Igantzi, propietaria del centro turístico. Las obras del centro están avanzadas y ayer recibieron la visita de la presidenta del Gobierno de Navarra, Yolanda Barcina, el consejero Juan Luis Sánchez de Muniáin y el director general de Turismo y Comercio, Carlos Erce, así como la alcaldesa de Igantzi, Lourdes Ibarluzea, y concejales de la localidad.

Ubicado en una finca de 75 hectáreas, este centro vacacional contará con tres modalidades de alojamiento de distintas características y precios -hotel, cabañas y albergue- y capacidad para 200 plazas. El complejo vacacional está dirigido a familias y grupos de visitantes, así como a empresas que quieran albergar encuentros dirigidos a promover la formación de equipos. Por otro lado, también se quiere atraer al turismo deportivo y al idiomático, modalidad cada vez más demandada por quienes dedican sus vacaciones a realizar actividades de inmersión en un idioma. Por último, y como elemento diferenciador respecto a otras opciones vacacionales, se han creado espacios pensados para recibir visitantes de día que paguen una entrada por utilizar sus actividades.

el Palacio Se trata de una casa noble, cuyo origen se remonta a los siglos XI y XII. Blasonada y de cuatro alturas, ha sido rehabilitada y transformada en un apartotel de 17 habitaciones. Cada planta dispone de 300 metros cuadrados y cada habitación cuenta con una cama de matrimonio, un sofá cama y un pequeño office con fregadera y microondas. El edificio tiene también un restaurante panorámico, sala de estar-bar y salón de reuniones para empresas. El centro vacacional dispone, asimismo, de 12 cabañas de estética finlandesa construidas en piedra a lo largo de una ladera, con dos habitaciones y una cocina-salón con una pared ventanal y un porche y un albergue en un nuevo edificio construido en la parte más baja de la finca con capacidad para 48 personas en habitaciones de entre 4 a 12 personas.