Fiel a su cita, Olite albergó por vigésimo tercer año consecutivo sus populares Fiestas Medievales, de Interés Turístico Nacional. Lo hizo tanto el sábado como el domingo, dos jornadas en las que la localidad hizo gala de su rico patrimonio histórico de la mano de artesanos, juglares, actuaciones teatrales y musicales, que contribuyeron al disfrute de locales y turistas.

En esta ocasión ejerció de pregonero, el sábado, el profesor y dramaturgo Ignacio Aranguren, Premio Príncipe de Viana de la Cultura, quien leyó un texto “teatralizado e inspirado en Olite para dar comienzo a la festividad” repasó ayer una “satisfecha” María Amatriain, del Consorcio de Desarrollo de la Zona Media, entidad organizadora del evento junto al Ayuntamiento. En este sentido cabe destacar que durante todo el fin de semana se han sucedido los desfiles, las danzas y los combates entre caballeros a cargo de la compañía Rioja Medieval, cuyos miembros, como en ediciones anteriores, explicaron cómo vestían los caballeros en el siglo XV y qué armamento utilizaban. “Es el tercer año que venimos y la verdad es que estamos encantados con la respuesta de la gente” subrayó Roberto Palomero, quien desveló además que suelen comprar las armaduras por Internet “por unos 2.500 euros”. Asimismo adelantó que el grupo se inspirará en la vestimenta que, según consta en la portada de la iglesia de Santa María de Olite, utilizaban los caballeros de la época en Navarra para confeccionar futuros atuendos. Y es que el grupo se nutre de diferentes fuentes documentales a la hora de desempeñar su labor, mayormente en temporada estival. “Es un hobby como otro cualquiera y disfrutamos con ello sobre todo cuando vemos cómo reaccionan los niños y niñas” apuntó Palomero.

Otro de los puntos fuertes fue el estreno de la representación teatral, obra de Mikel Zuza (escritor y miembro del Consejo Navarro de Cultura), basada en la boda que en 1439 unió al Príncipe de Viana (Carlos de Trastámara y Evreux) con la noble borgoñesa Inés (Agnés) de Clèves. Participaron en la representación 50 voluntarios, entre los que se encontraban Asier Lizarazu, representando al Príncipe Carlos; Amaya Sánchez, a la princesa Agnés de Clèves; Edurne Izurriaga, a la reina Doña Blanca; Carlos Izuriaga, a rey Don Juan; Mari Villabona, a Don Juan de Beaumont; Luis Izuriaga, a Johan de Clèves; Emilio Ochoa, al heraldo; y Andoni Lacarra, alcalde de Olite, al obispo.

“Que el alcalde participe en la función es la mejor forma de mostrar la implicación de Olite con sus Fiestas Medievales” subrayó María Amatriain al respecto. Y es que Lacarra tiene claro que debido a la afluencia de público, “la mayor de todo el año”, se trata del “evento cultural, junto con el Festival de Teatro Clásico, más importante del verano”. Y es por ello que aunque los medievales se suelen celebrar el primer fin de semana de agosto, se han tenido que trasladar forzosamente a los días 20 y 21 para no coincidir con la clausura del festival de teatro. Sin embargo, el consistorio apuesta por retomar el calendario habitual de cara el año que viene, una decisión que contentará a buen seguro a los 70 artesanos desplazados hasta Olite, quienes percibieron menos visitantes.

70 artesanos Entre los diferentes puestos de venta se encontraba un habitual como Pedro Pascual Calandria, de Mundo Medieval, vendiendo como desde hace una década escudos heráldicos en piedra, madera, cerámica o pergamino y Jorge Fernández, que encandiló a los presentes con diferentes joyas elaboradas a partir de oro vegetal, un material proveniente de Brasil que se caracteriza “por su ligereza, por no producir alergias y porque se puede mojar”. Pascual, por su parte, recordó que “hasta el año 1835 los escudos de armas eran el DNI del Medievo y como tal te identificaban”.

Además de los actos programados con motivo de las Fiestas Medievales, como visitas guiadas a la iglesia de Santa María o exhibiciones de tiro con arco y ajedrez, la organización valoró “positivamente” las conferencias y conciertos llevados a cabo la semana previa, destacando la actuación de Maite Itoiz y John Kelly, quienes reunieron a más de 200 personas en el patio de armas del Palacio Real con su concierto Historical.