tafalla - El año pasado se registraron en Tafalla un total de 593 litros por metro cuadrado en precipitaciones de lluvias, una cifra ligeramente inferior a la contabilizada en el 2016, que alcanzó la cuantía de 600 litros. Cabe destacar que el mes más lluvioso fue junio con un registro de 127 litros.
El día 8 de ese mismo mes, con una fuerte tormenta, fue el de mayores precipitaciones con 50 litros y la particularidad de que 37 de ellos se recogieron en apenas diez minutos. El día 25, también del mismo mes, se volvieron a contabilizar otros 42 litros.
En lineas generales se puede afirmar que el año 2017 ha sido un buen año de lluvias, dentro de la media de los últimos diez años que se sitúa en los 593,5 litros anuales, aunque estas precipitaciones han caído de forma muy irregular, con largos periodos de sequía y con pocas heladas en el periodo invernal.
Este largo periodo de sequía se ha producido principalmente durante el segundo semestre del año y se ha podido ver en el poco caudal del río Cidacos, en el que la presa de Ereta no ha llegado a saltar entre los meses de junio y diciembre. El día más frío del pasado año fue el del 19 de enero con el termómetro llegando a marcar los 6 grados bajo cero.
julio, más seco Por el contrario, el mes más seco del año fue julio, con únicamente 6 litros en sus 31 días, acompañados además de calor, temperaturas altas y fuerte cierzo. Durante el pasado año abril fue precisamente otro de los meses más secos del año -a pesar del refrán- con apenas 13 litros y unas heladas los días 21, 22 y 23 de ese mes.
La nieve tampoco se pudo ver apenas durante el pasado año en Tafalla. El día 20 de enero, dedicado a San Sebastián (patrono de la ciudad) cayeron unos pocos copos en las horas del mediodía y el 8 de febrero volvieron a caer aunque no llegaron a cuajar.
Con un segundo semestre del año muy seco, el 18 de octubre fue una jornada que alivió muy ligeramente la situación al recogerse ese día 13 litros. Noviembre también fue de pocas lluvias, con 27 litros, que junto a las altas temperaturas de jornadas precedentes obligaron a adelantar una buena campaña olivarera.
Con la llegada del último mes del año se volvieron a registrar mejores precipitaciones con un total de 66 litros. Entre las curiosidades que deparó el 2017 cabe citar que el día 31 de enero aparecieron en la torre de la iglesia de San Pedro las dos primeras cigüeñas, adelantándose ligeramente al dicho popular de “por San Blas las cigüeñas verás” refiriéndose a los primeros días de febrero. Todos estos datos han sido recogidos y facilitados por el exalcalde de la ciudad, Pablo Jurío. - C. Armendáriz