Hacia 1895 en los corrillos y tertulias pamplonesas se hablaba sobre la marcha de la guerra de Cuba, especialmente sobre la muerte del líder independentista José Martí, que había sido emboscado y muerto el 19 de mayo cerca de la localidad de Palma Soriano.

La imagen fue obtenida en un día soleado por uno de los pioneros de la fotografía en Pamplona, Fidel Veramendi, y muestra la cuesta de la Estación unos metros más abajo del Portal Nuevo. Un carro cargado con pesados sacos y tirado por tres mulas está a punto de adelantar a un paseante que asciende hacia Pamplona, vestido de traje con pajarita, bastón y sombrero canotier. Tanto el paseante como el conductor del carro se han percatado de la presencia del fotógrafo, y le miran con curiosidad. La vía, sin asfaltar, va flanqueada por un muro dotado de ventanas de tiro para fusilería, y detrás se adivina el perfil de los montes situados al norte de Pamplona.

Hoy en día la zona ha cambiado profundamente, aunque no es imposible encontrar algunas significativas referencias. Vemos, por ejemplo, que el murete aspillerado de 1895 ha sido derribado, y en su lugar hay hoy una barandilla que permite asomarse para disfrutar de la vista, justo encima del río Arga. Por encima podemos distinguir el perfil de los montes, incluido el arranque del monte Ezkaba-San Cristóbal, en el extremo derecho de la foto y justo en el lugar en el que el elegante caballero transitaba en 1895. La calzada, sensiblemente ensanchada y debidamente asfaltada y delimitada, va flanqueada por un lustroso bidegorri, signo visible de una Iruñea que evoluciona hacia la ciclabilidad y la sostenibilidad, al igual que todas las ciudades europeas en este siglo XXI.

En cuanto a José Martí, muerto de tres disparos de fusil hace ya 123 años, es hoy considerado un héroe nacional en la isla de Cuba.