El pimiento del piquillo de lodosa, profeta en su tierra

LODOSA - El color rojo y el olor a pimientos volvieron a cautivar ayer en Lodosa a cientos de vecinos y visitantes que se acercaron hasta la localidad ribera para celebrar la X Jornada de Exaltación del Pimiento del Piquillo de Lodosa, una cita muy asentada en el municipio ribero que pretende potenciar este preciado “tesoro rojo”.

La mañana arrancó con un acto oficial en una finca local a la que acudieron autoridades forales y locales. De hecho, Jesús Aguirre, presidente de la DO Pimiento del Piquillo de Lodosa, fue el primero el tomar la palabra. A pesar de asegurar que ha sido un año “extraño” por las olas de calor, afirmó que “hemos sacado un pimiento de primera, no muy grande, como es el piquillo, soberbio de calidad y con una textura extraordinaria”.

El alcalde de Lodosa, Pablo Azcona, y la consejera de Desarrollo Rural y Medio Ambiente, Itziar Gómez, también tomaron la palabra. El primer edil destacó que la cita supone uno de los hitos más importantes de la “agenda lodosana”, mientras que Gómez apuntó que el sector agrario y el producto local y de temporada “conservan la biodiversidad, mantienen los paisajes, potencian la economía de proximidad, mejoran los pueblos y palian los efectos del cambio climático”.

En esta cita, además, se entregó el cuarto Piquillo de Plata, en este caso al cocinero y comunicador David de Jorge. Entre risas y bromas, el galardonado aseguró que nunca le habían distinguido “en un sitio tan increíble” y que el premio “es muy merecido porque llevo toda la vida comiendo pimientos como una bestia”.

Además, y ya en tono serio, reiteró la importancia de cuidar el sector primario.

intensa agenda El día de ayer, además, acogió decenas de actos en el Paseo, la plaza central del municipio. Allí los asistentes pudieron ver cómo se asan y pelan los pimientos del piquillo de Lodosa de forma tradicional y, además, los pudieron comprar.

Una gran feria con productos locales, de artesanía y gastronomía llenaron este espacio y, además, la comparsa de gigantes y la banda de música se encargaron de amenizar la mañana.