- El vicepresidente primero y consejero de Presidencia, Igualdad, Función Pública e Interior, Javier Remírez, y el alcalde de Baztan, Joseba Otondo, lanzaron ayer un mensaje unívoco a la ciudadanía del valle apelando a la responsabilidad individual y a la necesidad de mantener las medidas preventivas ante la suspensión de las fiestas patronales de las distintas localidades, de cara a evitar la propagación de la pandemia del covid-19.

Ambos mantuvieron ayer un encuentro en Elizondo, que hubiera comenzado ayer sus fiestas de Santiago y que fueron suspendidas por la pandemia de la covid-19, al igual que las del resto de localidades del Valle de Baztan. A la reunión se sumó también la alcaldesa de Elizondo, Alazne Sansiñena Lertxundi. Curiosamente la reunión se produjo a la misma hora en que hubiera sido el chupinazo de las fiestas, aunque a mediodía, no había nadie en la plaza, cuando otros años suele estar abarrotada.

El vicepresidente Remírez trasladó el apoyo del Gobierno de Navarra a la decisión de suspender las fiestas y recordó que este año no toca festejar: "hay que seguir siendo solidarios, cumpliendo las medidas de prevención sanitaria y evitando aglomeraciones y celebraciones también en aquellos días más significativos, para así poder disfrutar con más ganas el año que viene".

Remírez destacó "la gran responsabilidad y compromiso mostrado hasta ahora por todos los vecinos y vecinas del Valle", que el pasado fin de semana hubiera celebrado el Baztandarren Biltzarra, y que también fue suspendido. Asimismo, recordó que la posibilidad de contagios sigue presente "por lo que no podemos relajarnos, la situación exige no bajar la guardia".

Por su parte, el alcalde Baztan, Joseba Otondo, quiso recordar "el momento tan duro" que se vivió en marzo y abril y pidió a la ciudadanía "actuar en consonancia", por eso, insistió, "es importante hacer hincapié y recordar que es necesario actuar con responsabilidad y con cautela". En esta idea también incidió Alazne Sansiñena: "Nos toca ser responsables. No hay fiestas. Ya vendrán tiempos mejores donde podremos disfrutar de ellas".

Durante la reunión mantenida ayer, repasaron las últimas medidas preventivas adoptadas por el Gobierno de Navarra, como la prohibición del uso de cuartos, bajeras y piperos, el cierre de bares y locales de ocio nocturno y hostelería a las dos de la mañana y la prohibición de botellones entre otras.

El pueblo y los bares de Elizondo ya tomaron medidas hace pocas fechas, cuando acordaron cerrar los locales a las 2 de la madrugada, así como que tuvieran en horario nocturno iluminación al 100% y la música a bajo volumen "para evitar ambientes festivos que dieran lugar a situaciones que nadie desea". Hay que extremar las medidas de prevención", recalcaron, tras recordar que el Valle de Baztan es, en estas fechas estivales, "un punto de encuentro turístico", con una gran afluencia de personas de distintos lugares de procedencia, que acuden a disfrutar del entorno natural. Según comentó, este atractivo turístico no debe suponer un riesgo para la salud, de ahí que hiciera extensiva la petición de responsabilidad a las personas visitantes.

El vicepresidente Remírez destacó que "el Gobierno de Navarra tomará cuantas medidas sean necesarias, de forma parcial o en todo el territorio de la comunidad, para preservar la salud pública y para evitar nuevos contagios".