- Cerca de un centenar de personas, en su mayor parte del Club Ciclista Cirbonero, homenajearon el domingo a las 9.00 con una concentración al cirbonero de 52 años Patxi Jiménez Navascués. El pasado lunes, cuando practicaba ciclismo en una carretera de Toledo donde residía con su esposa y dos hijos de 16 y 11 años por motivos laborales, fue arrollado por un vehículo produciéndole la muerte y huyendo su conductor posteriormente. Gracias a las redes sociales el conductor fue rápidamente detenido y puesto a disposición judicial. El acto, organizado por el Club Ciclista Cirbonero, al que perteneció mientras estaba en Cintruénigo, contó con la presencia de su madre, Luisa Navascués, que portaba un retrato de su hijo, sus hermanos Rita y Jesús, numerosos primos y sobrinos. También estuvieron presentes amigos, el alcalde, Óscar Bea, y varios miembros de la Corporación cirbonera. Al final se guardó un minuto de silencio.