42 puntos de recarga y estacionamiento, 400 bicis eléctricas y 824 anclajes. El Ayuntamiento de Pamplona ultima los detalles del nuevo sistema de bicicletas eléctricas públicas que estará en funcionamiento "a finales de noviembre", ha anunciado el concejal de Movilidad, Fermín Alonso.

El proyecto arrancará "con un mínimo" de 20 estaciones situadas, por ejemplo, en Carlos III -junto al Teatro Gayarre, en la intersección con Leyre y en el cruce con Gorriti-, Amaya, El Bosquecillo o Pío XII. También se han ubicado en barrios alejados del centro : calle Londres -Erripagaña-, Concejo Ardanaz -Mendillorri-, María Lacunza -Soto Lezkairu- o avenida Guipuzkoa -Rochapea-. Además, destaca Alonso, "en alrededor de treinta puntos" ya se ha realizado la acometida eléctrica y se ha instalado la infraestructura para la recarga y el estacionamiento, pero en algunos aún sin corriente, que depende, matiza el edil, de la compañía que suministra la energía.

Las 400 bicis eléctricas ya están listas para rodar, pero no todas saldrán a la calle el día de la presentación. "El número dependerá de los puntos de recarga y estacionamiento que haya en funcionamiento porque si no nos quedaríamos sin espacios libres y habría problemas de aparcamiento", explica. Con las 42 bases instaladas, previsiblemente antes de final de año, los ciudadanos podrán usar toda la flota y en 2022 el Ayuntamiento adquirirá otras 100 bicicletas, 500 en total, y Pamplona se convertirá en la ciudad del Estado con mayor índice de bicicletas por cada 1.000 habitantes: 2,5.

El perfil del usuario, asegura Alonso, será variado. Por ejemplo, enumera, las personas que no tienen la capacidad económica para comprarse una bicicleta eléctrica, los que sí pueden pagársela pero no cuentan con un "lugar seguro" donde guardarla en casa y en el trabajo, gente que quiere desplazarse en bicicleta por la ciudad pero que no lo realiza debido a su condición física y a que "la orografía ejerce de barrera", ciudadanos que "aún no se han animado a la movilidad sostenible y que consideren este medio atractivo" o turistas. E incluso los que ya se mueven en bicicleta: "La última ordenanza de movilidad establece que los ciclistas deben circular por la calzada. Muchos amigos me dicen que pasan miedo por ir a 12 kilómetros hora y que les pasen los coches. Una bici eléctrica te empodera al ir a más velocidad y te permite seguir circulando por la calzada", defiende Alonso.

824 anclajes

Las 400 bicicletas eléctricas ofrecen un sistema de alimentación -con tres niveles de apoyo y tres velocidades- que se corta cuando el usuario alcanza los 25 km/h, empuja en la arrancada del pedaleo hasta llegar a los 6 km/h y son adaptables gracias a un sillín regulable con una altura mínima de 1,50 metros.

Los ciclos también disponen de elementos en pro de una correcta visibilidad y seguridad: luces intermitentes en la parte posterior que se activan accionando un interruptor localizado en el manillar y se apagan automáticamnte a los 10 segundos y otra trasera que se enciende cuando se utilizan los mandos freno.

Para evitar el vandalismo y el hurto, se han colocado cámaras de videovigilancia en algunas bases, se ha instalado un sistema de alarma en los 824 anclajes que se activará cuando se tire de una bicicleta con una fuerza superior a los 25 kilogramos y todas cuentan con un sistema de GPS protegido. "Puede haber algún cafre que la arranque, pero si la sacas legalmente quedas totalmente registrado ya que la bicicleta se vincula a una tarjeta de usuario o a una aplicación con un sistema de pago y tus datos. Además es contraproducente porque hasta que no la entregues te va a seguir cobrando. Es un modelo de bases y no de free floating, en el que te pueden tirar el patinete al río Manzanares y ya la has liado", comenta Alonso.

El Post-it

Dos tipos de usuarios. Existen dos perfiles de usuarios. Por un lado, los abonados mensuales, 15 euros, o anuales, 40 euros, que acceden a unos precios por minuto más económicos: 2,5 céntimos durante la primera media hora, cuatro céntimos durante los siguientes 30 minutos y 10 a partir de la hora. Por otro lado, los usuarios ocasionales. El precio por minuto será de cuatro céntimos durante la primera media hora, seis céntimos en los siguienres 30 minutos y 10 céntumos a partir de la hora. El pago se realizará on line a través de una app.

Solo para bicis públicas. Los 42 puntos de recarga y estacionamiento que ha instalado el Ayuntamiento de Pamplona son exclusivos para las 400 bicicletas eléctricas públicas ya que son las únicas que se bloquean en los 824 anclajes. El edil Fermín Alonso recuerda que los ciudadanos pueden estacionar y recargar sus bicicletas eléctricas en los aparcamientos NBici-Biziz que hay diseminados por la ciudad.