- Navarra Suma se quedó ayer sola en Burlada en su intento de sacar adelante los presupuestos, de algo más de 15 millones de euros y sin grandes inversiones porque, tal y como señaló la alcaldesa, Ana Góngora, se van trabajando mediante modificaciones presupuestarias. Anunció partidas destinadas a los presupuestos participativos, las pistas de pádel o la renovación del complejo de piscinas y animó al resto de grupos a realizar propuestas pero se encontró con una lluvia de críticas, todas en la misma línea, porque tal y como destacaron -y coincidieron-, la prioridad para el equipo de Gobierno debería haber sido "la viabilidad económica" del Ayuntamiento, que cuenta con un déficit que ronda los 800.000 euros, "y en tres años no se ha hecho nada".

"No existe un informe de viabilidad, no tenemos datos sobre los que basarnos ni un debate en comisión ni en ningún otro foro. Es cierto que ha habido Covid e inundaciones, pero se han reactivado ciertos temas y la viabilidad y el futuro administrativo del barrio de Erripagaña no", valoró Íñigo Uharte (Geroa Bai). También desde Podemos Lourdes Lozada criticó que "aprobar unos presupuestos con ingresos y gastos basados en los ICIOS, para terminar una legislatura porque ya ven que en la siguiente no van a estar en el equipo de Gobierno, no me parece para nada responsable". El plan de viabilidad, "que ha anunciado para mañana, tenía que haber comenzado a trabajarse al día siguiente de aprobar el presupuesto del año pasado".

Txema Noval (Cambiando Burlada) señaló que, respecto a las cuentas, "nos sorprende que se suprima una partida por gestión de actividades en la ludoteca, habría que incrementar las destinadas a personas mayores y echamos en falta una mayor apuesta por consolidar la participación ciudadana, pero en líneas generales no tenemos muchos reparos". Aunque "hace mucho tiempo que el problema es la salud económica del Ayuntamiento, la asignatura pendiente en la que hay que volcarse. Rechazamos el presupuesto porque significaría decir que aquí no hay problemas".

El socialista Kevin Lucero lamentó que no exista planificación, "vamos trabajando en función de los fuegos que se abren cada mes y se presentan unas modificaciones presupuestarias u otras. En este Ayuntamiento lo extraordinario es hacer bien lo ordinario", señaló, y dijo que "en un presupuesto las inversiones tienen que servir para enfocar qué municipio queremos a futuro, deben ir recogidas y no se contemplan, no tienen visión para Burlada".

Berta Arizkun (EH Bildu) indicó que "después de tres años en los que no se ha encarado este tema de ninguna manera llegamos a la conclusión de que a Navarra Suma no le preocupa o no tiene la capacidad de abordar esta cuestión con seriedad. O ambas. El presupuesto no contempla ninguna partida para un plan de viabilidad, tampoco se ha abordado el futuro de Erripagaña, que es clave para el barrio y para el futuro del Ayuntamiento de Burlada", coincidió con Uharte. "No vamos a contribuir a que se siga agravando un problema que debería haber sido una prioridad. No nos valen excusas de covid, de riadas y de 'es que solo somos cinco'".

La alcaldesa, por su parte, defendió que "por votar en contra del presupuesto no se soluciona el tema de la estabilidad presupuestaria" y lamentó "que ese sea el argumento". Ir en contra de las cuentas "es perjudicar el día a día porque no vamos a tener una herramienta de gestión y vamos a tener que estar trayendo modificaciones presupuestarias, con más trabajo para el personal, que no va a poder dedicarse al tema de la viabilidad", dijo.

Recuperar el Archivo. El equipo de Gobierno llevaba una propuesta para recuperar el archivo municipal, anegado tras la riada, pero decidió dejarla sobre la mesa a falta de una reunión con el Archivo de Navarra y los vecinos que han conformado una plataforma para recuperarlo.

La Nogalera. Se aprobó el proyecto para La Nogalera, para reducir el riesgo de inundaciones, con un gasto de 2 millones condicionado a una subvención.