Des-adarve llevará el arte efímero a Tudela con cuatro nuevos proyectos

Des-adarve eligió el pasado mes de junio los cuatro proyectos que llevarán el arte efímero a Tudela. A partir de septiembre, la Real Casa de Misericordia, el palacio Marqués de Huarte, el Mercado de Abastos y el palacio Marqués de San Adrián acogerán las originales iniciativas que pretenden sacar el arte de museos y galerías. Se trata de la cuarta edición del certamen, la primera después de la pandemia, que entre 2017 y 2019 colocó a la ciudad ribera en el mapa con una de las actividades culturales más novedosas, tratando de aunar arte, pensamiento y el patrimonio arquitectónico tudelano.

Sin embargo, desde la llegada de Alejandro Toquero y Merche Añón al Consistorio, el proyecto quedó abandonado, sin ninguna intención de realizarse; y ha sido el Gobierno de Navarra, mediante una enmienda a los presupuestos que presentó I-E, quien ha asumido la mayor parte del coste de la celebración. En total, alrededor de 35.000 euros de presupuesto aportados por las consejerías de Cultura y Juventud, Nasuvinsa y el Instituto de Igualdad. El Ayuntamiento de Tudela no aportará ni un solo euro, aunque sí ha cedido los espacios de forma gratuita durante su horario habitual. 

Este año se presentaron 19 propuestas, nueve para la modalidad joven y diez para la modalidad libre, de entre las cuales fueron seleccionadas las cuatro que finalmente serán ejecutadas. El jurado estuvo compuesto por la arquitecta Estefanía Fernández-Cid, especialista en restauración del patrimonio; el artista tudelano Rafa Munárriz y el sociólogo y consultor cultural Javier Espinosa. Además, estos contaron con la asistencia técnica de los comisarios del certamen: Mikel Pau Casado y Marta Pérez. 

Entre los proyectos elegidos, en la residencia de ancianos Real Casa de Misericordia se llevará a cabo la propuesta Ecos Visuales, de las artistas Laura Ruiz Morote y Eva Gil Donoso, de la modalidad joven. Esta idea, originalmente pensada para el claustro de la iglesia del Carmen, consistirá en una serie de paneles giratorios de espejo dispuestos de manera desigual en una retícula oculta. La condición móvil de los elementos permitirá a los visitantes modificar continuamente el espacio, fragmentarlo y generar nuevos recorridos y ecos visuales. Se invitará así a reflexionar sobre la fragmentación del espacio, en constante cambio, y sobre nuestra capacidad de intervención.

Mediterráneo se instalará en el palacio Marqués de Huarte, actual Biblioteca y Archivo. El proyecto, de Juan Carlos López, de la modalidad libre, pretenderá ser una alegoría de la situación de la emigración en el mar Mediterráneo. Para ello, el artista se puso en contacto con la Asociación Senegalesa de Tudela, que colaborará con él en el diseño y producción. Así, el trabajo consistirá en la creación de un manto a partir de 3.500 bolsas recicladas y reciclables que, en su primera fase, se llenarán de pintura. Luego, entrará en juego el espectador, que las manipulará por medio del tacto y la interacción. Antes de llegar al final del proceso, la obra pasará a estar cubierta con una capa ligera de pintura en espray, que no resistirá el empuje que ejerce la bolsa al hincharse y destruirá la cáscara exterior, descubriendo de nuevo los pigmentos embolsados.

Para el Mercado de Abastos, el colectivo Artefacto Social ha ideado ¡Tan lejos… Tan lejos!, también de la modalidad libre, que implicará a colectivos de la ciudad. Así, se establecerá un espacio de diálogo dentro del mercado mediante la disposición de documentos, fotos, vídeos y objetos; utilizando paramentos y utensilios del mercado como cajas de frutas y similares. Además, se propondrá la creación conjunta de una pieza dentro de uno de los patios del mercado con material del propio mercado u otros. Lo importante será entonces la participación espontánea del público.

Por último, en el palacio Marqués de San Adrián, actual sede de la UNED, se instalará El paisaje en la ciudad, proyecto de María Esteve, de la modalidad joven. El trabajo consistirá en la construcción de un retrato urbano de la propia ciudad mediante la técnica del frotagge. Esta consiste en tomar el suelo como espacio de creación, captando fragmentos que evoquen a las vistas aéreas. Así, a partir del tránsito de las personas, se irá componiendo el fragmento. Este trabajo, que pretende encontrar y plasmar la multitud de paisajes presentes en el día a día, se complementará con unas piezas cerámicas.

De este modo, del 10 al 18 de septiembre, Tudela verá reconvertidos cuatro de sus espacios más emblemáticos. Además, la organización del certamen acompañará los proyectos con otras actividades. Entre ellas, están previstas visitas guiadas, varias charlas y conferencias, un debate con los artistas, un taller con Ekilikua para niños y otro con el colectivo Urbanas sobre urbanismo feminista, así como un encuentro de poesía, cine en la calle y un pasacalles de música y poesía.