Cirauqui/Zirauki recuperó después de dos años su Sexta Edición del Día del Vino. Una cita que va evolucionando y a la que ayer se pudo asistir en transporte público tanto desde Tierra Estella como desde la comarca de Puente la Reina-Gares. “Buscamos el menor impacto y creemos que puede ser una buena manera de que la gente se acerque hasta nuestra localidad en un día tan importante”, aseguró el alcalde de la localidad, Julio Laita.

La explanada de la Bodega San Cristóbal sirvió de recibimiento a los participantes.

La jornada la abrió Martín Monreal, el exjugador y exentrenador de Osasuna, se mostró satisfecho y lanzó el mensaje de que “vamos a pensar en grande y que pronto estos vinos se conozcan en todo el estado y en todo el mundo” “Ha sido una grata sorpresa conocer este pueblo y el tesoro de sus bodegas”, aseguró Martín, quien animó a que sigan evolucionando y a que también sepan mantener “la esencia de los que hicieron posible la economía del vino en Zirauki”.

Degustación de pintxos y vino en la bodega de Casa Zerio.

Degustación de pintxos y vino en la bodega de Casa Zerio. Javier Arizaleta

En este sentido se habilitaron varias bodegas en la localidad. Por una lado la cooperativa San Cristóbal que acoge la mayor parte de la producción de las viñas de la localidad y que ayer sirvió de recepción de los invitados y también el punto de encuentro de los más pequeños, donde pudieron disfrutar de juegos y de la elaboración real de mosto.

Exposición de Irulegui y Bermejo en la Bodega de Eguilaz.

Exposición de Irulegui y Bermejo en la Bodega de Eguilaz. Javier Arizaleta

También estuvo abierta la nueva bodega Iturdaki, una ambiciosa iniciativa vitivinícola que produce vinos de crianza en el corazón de casco viejo de Cirauqui, a cuyo frente se encuentra Pedro Iturgaiz, que junto con su familia ha montado un negocio familiar en el que elaboran diferentes tipos de vino utilizando “sistemas tradicionales y de calidad como la decantación de los vinos”.

Martín Monreal abrió el pregón de la jornada en la plaza.

Martín Monreal abrió el pregón de la jornada en la plaza. Javier Arizaleta

Por otra parte, Cirauqui sigue avanzando en la recuperación de las viejas bodegas familiares. “Es un pueblo en el que en cada casa había una bodega y nuestro propósito es que, poco a poco, se vayan recuperando”, afirmó Laita. Ayer se pudo visitar y degustar vinos y pintxos en varias locales de la localidad donde se combinaron con propuestas artísticas o muestras etnográficas de material agrícola del mundo vitivinícola local. Algo que permitió ver los tesoros de la casa Pardo o de Remigio Caro, todo un pionero del vino en Navarra cuyos caldos ya recibieron premios en la Exposición Universal de Chicago en 1893. En este sentido, el alcalde Julio Laita recordó una referencia musical del cantautor de Urretxu, Jose M.ª Iparagirre, “en la que se mencionan los vinos de Zirauki”.

La fiesta, que contó con la animación de la fanfarre local Galtzarra y los trikitalaris de Estella-Lizarra Iker eta Mikel, avanzó por otras bodegas recuperadas como las de Casa Eguilaz, donde se pudo ver las pintura de Pedro Irulegui y Manuel Bermejo; y la de Apellaniz que contó con un muestra de obras de madera del taller de Héctor Urra y esculturas de Yerai Paz y Nerea Díaz, así como un audiovisual que se proyectó en Casa Zerio.

En esta sexta edición del Dia del Vino/Aardoaren eguna de esta localidad de Tierra Estella, el alcalde de la localidad, Julio Laita reconoció que tienen varios objetivos. Por un lado, el “de promocionar Cirauqui y también que se conozcan sus vinos”. Aseguró que “hay que fortalecer el binomio Cirauqui y el vino”. Destacó que, a pesar de que ya no hay tanta gente que viva de las viñas en la localidad porque se han arrancado muchas vides, “sí hay gente con ganas que quiere preservar esta economía para la localidad”.

Los caldos de Cirauqui, que en buena parte son jóvenes, tienen un gran mercado en Navarra y sobre todo en Guipúzcoa. “Casi todo el vino se vende en la bodega cooperativa”.

La jornada contó con cientos de visitantes y se completó con una cata guiada en la Bodega Iturdaki, donde se pudo ver un audiovisual sobre el ciclo vegetativo de la viña y la elaboración de vino en la bodega.

Otro de los centros de la actividad fue la plaza del Ayuntamiento, donde además de puestos vinculados con el mundo del vino, se pudo ver muestras y diferentes clasificaciones de sus famosas garnachas de los términos municipales de la localidad.