Cuando se cumplen 130 años de la Gamazada, el pueblo de Uharte Arakil homenajeó a Felipe Gorriti. Y es que más allá de su importante trayectoria musical, con más de 300 obras escritas, se quiso reconocer su compromiso por la cultura, por la identidad y los derechos históricos de su pueblo. “Vivió en euskera y en ese renacer que vivió nuestra cultura, fue uno de los protagonistas más importantes”, señaló Gaizka Uharte, del colectivo popular Gu Gureak.

Lo cierto es que este músico nacido en Uharte Arakil en 1839 y fallecido en Tolosa en 1896 fue testigo de una época de profunda transformación, del desmantelamiento del régimen foral pero también del renacer que tuvo la cultura vasca con el objeto de mantener una identidad y la cultura de su pueblo que empezaron a ver en peligro. “Cuando Felipe Gorriti nació Navarra era un país que conservaba sus estructuras de estado, moneda, fronteras e incluso un pasaporte que les acreditaba como navarros. Posteriormente, los y las uhartearras tuvieron que asistir a dos guerras carlistas y ver cómo se acababa un régimen foral que les permitía tomar sus propias decisiones. La Gamazada fue el último episodio de aniquilación de un sistema político vigente en la época”, incidió Uharte. Al respecto, destacó que en torno a 200.000 personas dejaron Euskal Herria rumbo a las Américas y Filipinas, víctimas de dos guerras y de la imposición del servicio militar obligatorio. “Esta cifra es el doble de las personas que tuvieron que irse en la guerra del 36”, observó.

Recibimiento al músico, personificado en una de las figuras de la Comparsa de Gigantes y Cabezudos de Uharte Arakil.

EUSKALTZALE

Gorriti colaboró con la Asociación Euskara y participó activamente en las fiestas euskaras, que comenzaron a celebrarse en el siglo XIX en favor la cultura vasca, las costumbres, los bailes, los deportes y las canciones vascas. Asimismo, participó en 1890 en la revuelta popular contra la ley de Germán Gamazo, la Gamazada. “Felipe Gorriti puso la música a la canción de Olóriz para la inauguración del monumento a los fueros que se erigió en contra de la Gamazada con la aportación voluntaria de 120.000 navarros y navarras”, recordó Uharte, al tiempo que destacó que 250 uhartearras firmaron en el Libro de Honor de los Navarros en defensa de la Ley Foral.

El homenaje fue frente a la casa donde nació este compositor, enmarcado en la Euskal Jaia, una fiesta que se celebra cada dos años, con especial protagonismo del gigante Felipe Gorriti. No en vano, una de las figuras de la comparsa de Uharte Arakil le recuerda. Además, ayer lució una banda con el escudo local. Tampoco faltó su música, con algunas de sus obras que cantaron Kantuz taldea, ni bailes en su honor.