Los azagreses y azagresas, amantes del buen yantar, han salido a la calle para disfrutar en primer persona del XXI Mercado de Verduras de Invierno. Del campo a la mesa. Azagra siempre apetecible, una cita enmarcada en las fiestas de San Gregorio que ha llenado las calles del centro urbano de alegría, de risas y reencuentros y, sobre todo, de puestos de gastronomía, artesanía y moda. 

Uno de los actos centrales del día ha tenido lugar pasado el mediodía en el escenario de la carpa, y es que ahí la corporación municipal, con Rubén Medrano al frente, y tras leer Luis Sola el texto inaugural ponderando las verduras de invierno, ha nombrado al tenor José Luis Sola Zudaire como Amigo de Azagra 2023. 

De acuerdo con el primer edil “hemos considerado más que justo este reconocimiento porque José Luis ha llevado el nombre de Azagra allá por donde va”. En su discurso ha recordado, además, que Sola comenzó en la escuela de jotas y que después, y tras pasar por varias orquestas, ha acabado llegando a los mejores teatros del mundo”. 

Medrano, que le ha vuelto a pedir que “la Virgen del Olmo en la Bajada de fiestas te debería volver a escuchar y ojalá algún año puedas hacer un hueco en tu agenda para volver a encogernos el corazón en un día tan especial para los azagreses”, ha concluido agradeciendo el esfuerzo del tenor por estar allí (este sábado cantó en Oviedo) y “por estar en tu pueblo y ser parte de este día que espero sea emocionante e inolvidable tanto para ti como para toda tu familia. Gracias por llevar ese talento 'tarra' a tantos lugares del mundo

Arropado por sus familiares y amigos y recibido con un sonoro aplauso, al artista le han impuesto el pañuelo con el escudo de la localidad y le han entregado un diploma visiblemente emocionado. “Estoy muy feliz y enormemente agradecido al Ayuntamiento; me hace mucha ilusión porque un reconocimiento en tu pueblo es algo muy bonito y soy consciente de que hay muchas personas merecedoras de este galardón”. 

Sola, además, ha querido recordar y “dedicar este nombramiento a mi familia; a mi padre, mi tía, mi hermana, mujer, hija, primos y amigos y cómo no, también a todos los familiares que seguramente también estarían aquí emocionados, a todos los seres que hemos perdido en la familia; tíos, tías, primos, abuelos y, en especial, me vais a permitir dedicárselo a mi madre, que también estaría muy orgullosa de estar aquí y que seguramente con nuestra Virgen del Olmo y San Gregorio nos estará guiando en esta vida”. 

Por último, y recogiendo el guante que le ha lanzado el alcalde ha apuntado que “si la agenda me lo permite, y aunque hace mucho que no canto jotas desde el balcón, me comprometo a estar y a recordar aquellos tiempos tan bonitos. Este es mi pueblo y siempre lo llevaré en el corazón”. 

Pisado de la uva y brindis

Ahí mismo, y sin apenas tiempo para asimilar las emociones, Pedro Carrascón ha comenzado con el tradicional pisado de la uva, algo que lleva haciendo desde el año 2001 acompañando a su padre Julio. Él mismo, ha explicado, se encargó de recoger las uvas, unos 100 kilos que dividió en cinco canastos y que ha ido echando poco a poco a la prensa. “Esto no lo hago más que aquí, de año en año. Para hacer vino para casa sí que conviene soltar la prensa y sacar la uva para que cambie de postura, pero aquí es pisar y pisar”. 

El vino, que poco a poco se han ido acercando a catar los vecinos y vecinas, ha dado una graduación de 15º, “un buen número”, tal y como ha comentado tras medirlo el propio Carrascón que, aunque de momento no tiene relevo, ya se lo ha dejado caer a su hijo Iñaki en más de una ocasión: “me haría muchísima ilusión que subiese aquí conmigo, así como hice yo con mi padre en su día, aunque era abajo porque no había escenario. Esto es algo que me gusta y que llevo haciendo muchos años”.

Otras actividades 

La jornada, además, ha contado con talleres para los txikis, y con la cata de ostras llevadas para la ocasión por los ciudadanos de Audenge, en Francia, y con la de cardo con setas y menestra que ha elaborado Santi Martínez y que tres de las primeras vecinas que han logrado probarlas, y con los platos aún humeantes, han asegurado que “esto está exquisito”.