Tudela ha doblado en solo tres años la cantidad de alojamientos turísticos de la ciudad pasando de los 72 que había en 2020 a los 136 del pasado año 2023, lo que significa un crecimiento de un 88,8%. Por alojamiento turístico se entiende “albergues, campamentos, bungalows, apartamentos, casas rurales, hoteles, hostales, pensiones o establecimientos similares, destinados a proporcionar habitación o residencia a las personas, en épocas, zonas o similares turísticas”.

Este incremento es algo palpable en la ciudad donde, aunque se ha creado algún hotel más, se han multiplicado los apartamentos y viviendas turísticas ya que los carteles son fácilmente visibles por Tudela y además se nota en que el incremento de la plazas no se ha elevado en la misma proporción. Si con 72 alojamientos en 2020 había 879 plazas, en 2023, con 136, las plazas han subido hasta las 1.165, lo que significa el incremento de un 32,5%. Estas cifras evidencian que lo que se han multiplicado son los apartamentos destinados a los visitantes que llegan a la capital ribera.

En este sentido el equipo de gobierno de UPN en el Consistorio ha decidido crear una ordenanza para tratar de regular los apartamentos turísticos, por lo que el pasado viernes adjudicó a la empresa Loperena Portillo Arquitectos su redacción por un importe de 7.260 euros “con el objeto de regular el creciente mercado de viviendas de uso turístico que se está extendiendo en la ciudad”.

Hace cuatro años

Sin embargo, en varias ocasiones Contigo Tudela propuso al equipo de gobierno la elaboración de esta ordenanza, sin que, entonces Navarra Suma, viera la necesidad de elaborarla y rechazara la propuesta de forma bastante displicente. “Es innecesario por falta de quejas y es contraproducente para el fomento del turismo”, dijo el actual concejal de UPN Carlos Aguado en febrero de 2020, y añadió que de regular esas viviendas debería ser el Estado quien lo hiciera.

Ahora desde UPN no se ha dicho por qué han cambiado de criterio, si han recibido quejas al respecto, ni si ya no es contraproducente para el turismo o si ya no es necesario que lo haga el Estado.

La moción que presentó en febrero de 2020 Izquierda-Ezkerra perseguía realizar un estudio detallado sobre los apartamentos y viviendas turísticas existentes en Tudela, así como los diferentes alojamientos “para establecer medidas de actuación urbanísticas, turísticas y fiscales”. Igualmente apostaban por “revisar y actualizar la normativa urbanística, tanto el PGOU como el PEPRI, en virtud de lo que se obtenga en los estudios”. Una de las intenciones era evitar “molestias por el ruido” y “aumento del precio de la vivienda de alquiler”, evitando concentraciones excesivas.

Desde Navarra Suma, el entonces edil de Industria Aguado señaló que “a día de hoy no hay quejas vecinales por este tipo de apartamentos” y destacó que el turismo que viene a Tudela “no es de gente joven, ni conflictivos ni vienen a beber” y añadió que Tudela “está lejos de estar saturada turísticamente como para necesitar una regulación”.

Aguado hizo hincapié en que estos apartamentos turísticos “sirven para revitalizar el Casco Antiguo” y que de hacerlo “tendría que ser el Estado para que no haya 17 regulaciones distintas”. Concluyó que regular estos alojamientos turísticos “podría ser perjudicial para el turismo”.

Ahora

Cuatro años después, con esta ordenanza, el Ayuntamiento de Tudela pretende hacer lo mismo que se les propuso en 2020 “proteger a los residentes, promover el turismo sostenible, establecer medidas de minimización de molestias a los vecinos, proteger el comercio de proximidad y fomentar la actividad económica en el municipio”. Una elaboración de ordenanza que el equipo de gobierno no notificó a la oposición y que, como suele hacer, para darlo a conocer lo filtró a un medio de comunicación.

El proceso de elaboración de esta normativa contempla la emisión de un informe y un análisis de situación, así como una memoria justificativa; la realización de un proceso participativo y divulgativo de la ordenanza y la redacción del documento para su aprobación inicial. La adjudicataria tiene un mes, tras realizar el proceso de participación ciudadana, para la presentación del documento redactado.

Así desde el pasado lunes 4 de marzo el Consistorio ha abierto un proceso de participación en el que no facilita demasiado que el vecindario se implique ya que hay que presentar una instancia con las propuestas en el Consistorio o enviar un correo a urbanismo@tudela.es.

Las preguntas a las que se pide una contestación para la participación vecinal son “¿qué aspectos cree usted que debería regular la futura ordenanza?; ¿Cómo cree que se pueden reducir las molestias para el vecindario?; ¿Cómo piensa que esta normativa puede contribuir a incentivar el turismo y una actividad económica sostenible?; ¿Qué zonas o barrios del núcleo urbanos entiendes que deberían ser objeto de regulación por la Ordenanza de Apartamentos Turísticos?”.