El Departamento de Cohesión Territorial, a través de la Dirección General de Administración Local y Despoblación, ha financiado un nuevo punto limpio en Carcastillo que dará servicio a unas 5.000 personas de cinco localidades de la Mancomunidad de Mairaga. La instalación, que ha contado con una inversión de 104.618 euros del Plan de Inversiones Locales (PIL), 19.685 euros del Consorcio de Residuos de Navarra y 16.315 euros de la Mancomunidad de Mairaga, pondrá al alcance los vecinos y vecinas que viven en la comarca una solución para separar los residuos peligrosos y de difícil gestión.

El consejero de Cohesión Territorial, Óscar Chivite, ha inaugurado esta mañana la infraestructura y, en su visita, ha destacado “la importancia de dotar a la ciudadanía de la zona de un punto limpio para facilitar la correcta gestión de residuos que no se pueden depositar en los canales habituales de la recogida selectiva. Algo indispensable para que los residuos sean bien tratados y respetar el medio ambiente”.

En el acto también han participado la alcaldesa de la localidad, Olalla Fraile; el director general de Administración Local y Despoblación, Jesús María Rodríguez; el gerente del Consorcio de Residuos, Fernando Mendoza; y el presidente de la Mancomunidad de Mairaga, Carlos Alcuaz. 

Funcionamiento del punto limpio de Carcastillo

El funcionamiento de este nuevo punto limpio será los sábados de 10 a 12 horas.

Hasta la fecha, la Mancomunidad de Mairaga contaba con cinco puntos limpios en las localidades de Caparroso, Olite / Erriberri, Tafalla, Garínoain y Santacara. Esta nueva instalación, la sexta de la Mancomunidad, completa la red territorial de puntos limpios para cubrir las necesidades de servicio relacionadas con la correcta gestión de los residuos de todos los vecinos y vecinas.

La nueva infraestructura se incluye entre las inversiones que se deben realizar según lo establecido en el Plan de Residuos de Navarra 2017-2027, y pone al alcance del 100% de la ciudadanía de la zona una solución para separar los residuos peligrosos y/o de difícil gestión que se generan en los hogares o en pequeños establecimientos comerciales, tales como: escombro, poda, madera, voluminosos, residuos de aparatos eléctricos y electrónicos (RAEEs), etc.