Si bien la situación viene de atrás, estas últimas semanas, sobre todo con el comienzo del nuevo curso, se han incrementado las quejas entre personas usuarias de la línea de autobús Pamplona-Vitoria, que reclaman que se refuerce el servicio a determinadas horas ante la falta de asientos libres. “Tres personas mayores no pudieron coger el autobús de Pamplona a Altsasu porque estaba lleno. Ese mismo día, dos jóvenes viajaron sentados en el autobús que sale de la capital a las 21.00 horas, después de que el chófer se apiadara de ellas”, señala un grupo de usuarios a modo de ejemplo.

Al respecto, indican que la lista de situaciones “aumenta día a día, sobre todo entre las personas mayores”, como la de un señor que tenía concertada una cita médica en Pamplona no pudo coger el autobús de las 6.54 euros porque carecía de billete o la estudiante que llegó tarde a clase, según cuentan. “Esto ocurre con mucha frecuencia. Han eliminado el autobús de las 11.45 horas, así que los viajeros y viajeras se acumulan a las 13.00 horas y no hay sitio”, observan. Así, han enviado un escrito al departamento de Cohesión Territorial del Gobierno de Navarra en que el que se lanzan varías preguntas. “¿Hasta cuándo tenemos que aguantar estas situaciones? ¿Tienen en cuenta nuestros representantes las necesidades de la ciudadanía? ¿Por qué no realizan una consultar popular entre el TAV o que las gentes de los pueblos tengan un buen servicio de transporte público?”, preguntan.

Desde el Gobierno Navarra, la directora general de Transportes y Movilidad Sostenible, Berta Miranda, señala que “tenemos claro que debemos trabajar para oferta al ciudadano un servicio de transporte de calidad. Estamos trabajando con la empresa adjudicataria para adaptar la oferta a la demanda de servicios. Tenemos que adecuarnos a los trámites de la administración y a la normativa existente. Eso nos hace no ser lo ágiles que nos gustaría”.

Por parte de la empresa adjudicataria de la concesión, La Burundesa, observan que “estamos teniendo quejas y reclamaciones de los usuarios de la línea que da servicio en la zona de Sakana. Las estamos trasladando al departamento, que es quien autoriza y planifica los horarios y las expediciones que actualmente existen en la línea”.  

La puesta en marcha en mayo del pasado año de la nueva concesión Pamplona-Vitoria de NBus trajo cambios en el servicio. Entre otros, la prohibición a otras líneas que pasaban por Irurtzun a detenerse a dejar y recoger pasajeros. Lo cierto es que generó numerosas quejas entre vecinos y vecinas de esta localidad. Asimismo, según contaban, se redujo la frecuencia de autobuses y se incrementaron los tiempos de espera lo que originó en diferentes ocasiones que usuarios del servicio se quedaron en tierra porque no había plazas libres. En diciembre hubo cambios, a propuesta de La Burundesa, con dos refuerzos con salida a las 6.30 y 11.45 horas desde Pamplona. Pero en junio se eliminó el segundo.