Sabían que podía suceder y lo estaban deseando. Solo faltaba una buena tarde en el terreno de juego y que se dieran las condiciones necesarias en los resultados para que el ascenso de su equipo el CD Aoiz a Tercera se hiciera realidad. Además, ascendió el Juvenil. Justo el domingo de las fiestas txikitas del pueblo. La convocatoria no se hizo esperar: la noticia corrió en las redes y se convocó al homenaje a los dos equipos en el ayuntamiento.
Una alegría compartida
“Lo teníamos todo preparado, megafonía y pancarta: (Herri bat, sentimendu bat /Un pueblo, un sentimiento) para subir al balcón cuando acabara el partido. Nos hizo una ilusión terrible”, declara Jokin Arruti, concejal de Deportes. Una alegría compartida por el alcalde, Ángel Martín Unzué, que no se perdió la segunda parte del encuentro en casa contra el Iruña, con toda su emoción, en la que empezaron a llegar los resultados. El partido acabó con victoria gracias a un hat trick de Mañú.
Antes de ir al ayuntamiento, con su algarabía y la pancarta, el equipo se dirigió a casa de Tomás Ventana, octogenario fiel seguidor que no pudo, ese día acercarse al campo. “Nos recibió en el balcón, totalmente emocionado. Para nosotros era importante compartir ese momento con él”, dice el presidente, Javier Lizoáin (Lipo).
Una piña
Es un ejemplo con el que el directivo quiere poner, precisamente, el acento en el vínculo del club con el pueblo y en el respaldo recibido. Lo ha podido constatar en la docena de años que lleva en el puesto: partido a partido, fuera y en casa; en fase de ascenso, en Autonómica y ahora en Tercera... “Nos han acompañado muchas personas, vecinas y vecinos de todas las edades, las cuadrillas. Hemos conseguido una piña entre el pueblo y el equipo. Nuestro campo es una fiesta brutal”, afirma. Esa ilusión se deja sentir en el pueblo y repercute en todas las categorías, añade. La del domingo, opina fue “una celebración de la comunión y de la amistad”.
En este sentido, pone en valor que los chavales se mantengan. “No es fácil sostener los equipos, quieren prosperar”, asegura. Con 11 equipos en su haber, el C.D Aoiz es fútbol que hace pueblo. “Gracias al trabajo de toda la cantera, al Ayuntamiento, al edil Arruti, al patrocinio, especialmente de Muebles Polke, a los entrenadores Javi Serrano e Iker Unzué (Autonómica) y Juan Carlos Vicente e Iñaki Esparza (Juveniles)”, manifiesta Lizoáin. Sin pasar por alto el doble mérito de los dos equipos que recogen los frutos de una buena temporada, “con una imagen imborrable. Como un chupinazo”. Una despedida redonda de las fiestas txikitas de San Isidro.
