Lo que parecía una idea ajena al entorno rural, hoy se va consolidando como una herramienta estratégica en la lucha contra la despoblación. El Gobierno de Navarra presentó este martes en Ochagavía / Otsagabia la Red de Colivings del Pirineo, un proyecto que integra vivienda y empleo en zonas rurales despobladas y que busca fijar población.

Actualmente, 2 colivings ya están en marcha, en Roncal/Erronkari y en Ochagavía / Otsagabia, y otros 2 espacios se encuentran en fase de rehabilitación en Ezcároz/Ezkaroze y en el mismo Ochagavía/Otsagabia. La previsión es que, antes de que finalice 2025, la red cuente con 4 colivings activos y un total de 16 habitaciones individuales, todas ellas con zonas comunes habilitadas para la convivencia y el trabajo compartido.

CREAR COMUNIDAD

Esta iniciativa se enmarca en el Plan del Pirineo, impulsado por el Departamento de Cohesión Territorial a través de la Dirección General de Administración Local y Despoblación junto con la Mesa del Pirineo, formada por entidades locales, la sociedad pública Nasuvinsa-Lursarea y el grupo de desarrollo Cederna-Garalur.

Desde la primera convocatoria lanzada en el año 2022, el Ejecutivo navarro ha destinado un millón de euros para subvencionar proyectos que combinan el acceso a la vivienda con oportunidades laborales. “Consideramos clave en la estrategia de la lucha de despoblación en el Pirineo la unión de vivienda y empleo y, además, en la valoración de estas subvenciones se ha primado el modelo de coliving”, apuntaba ayer el director general de Administración Local y Despoblación Jesús María Rodríguez. Porque este modelo, que combina la vida residencial en comunidad con espacios privados, se ofrece como una alternativa innovadora y asequible para personas que tienen dificultad para acceder a una vivienda. “No sólo ofrece alojamiento, sino que fomenta la cooperación, el intercambio y la creación de comunidades para dar respuesta a una demanda del territorio plasmada en el Plan del Pirineo”, añadió Rodríguez.

MODELO CON RESULTADOS

En Roncal/Erronkari, el primer coliving en abrir sus puertas, Etxegozti, ocupa parte del antiguo hostal Zaltua y actualmente cuenta con cuatro habitaciones y zonas comunes, incluido un espacio de coworking. Gracias a las ayudas de este año, se ampliará con tres habitaciones adicionales. “Muchas personas buscaban empleo en nuestra zona, pero encontraban serios problemas para poder vivir, por lo que, de la mano de Gobierno de Navarra, apostamos por esta realidad. La experiencia del coliving ha sido muy positiva”, afirmaba su alcaldesa Amparo Viñuales.

El segundo coliving, Arbea, funciona en Ochagavía desde 2023. En él se combinan tres habitaciones con zonas comunes. Además, gracias a una inversión pública de 216.527 euros del Departamento de Cohesión Territorial, el Ayuntamiento está rehabilitando otro inmueble para ampliar la oferta local con tres nuevas habitaciones.

En Ezcároz/Ezkaroze, mientras tanto, ya han comenzado las obras para transformar una vivienda municipal en un nuevo coliving, también destinado a tres personas.

ASESORAMIENTO

Durante la jornada de presentación, responsables del proyecto compartieron experiencias y herramientas con representantes municipales del territorio. Uno de los hitos del encuentro fue la presentación del Manual de gestión de colivings, un documento que orienta a las entidades locales sobre cómo poner en marcha estos espacios. “Ayudamos a los Ayuntamientos en todas las fases, desde buscar financiación externa al margen de la fuente principal de financiación, que es la convocatoria de vivienda y empleo del Departamento de Cohesión Territorial, como en las gestiones de entradas y salidas de la gente, definiendo los criterios que se priorizan para entrar o no, y en todo aquello que necesiten”, explicaba ayer Irama Vela, del equipo territorial Gu Pirinioa.

La jornada incluyó además la intervención de la alcaldesa de Usurbil Agurtzane Solabarrieta, quien compartió la experiencia del proyecto Txirikorda, una vivienda comunitaria intergeneracional que ofrece alquiler tanto a jóvenes como a personas mayores, fomentando nuevas formas de convivencia.

Con esta red de colivings, el Gobierno de Navarra da un paso más en su apuesta por luchar contra la despoblación en los pueblos del Pirineo.