pamplona - La extensión de los contenedores con tarjeta que proyecta la Mancomunidad de la Comarca de Pamplona no será una realidad hasta el próximo año. Así lo anunció ayer el presidente de la entidad David Campión al término de la reunión del Consejo de Administración de la sociedad gestora en la que se dio luz verde al Plan de Gestión Anual 2020. El retraso en la implantación del nuevo modelo de recogida a toda el área metropolitana, siguiendo el ejemplo de la prueba piloto que se ha llevado a cabo en Azpilagaña y Nuevo Artica, pospone el cambio de contenedores de recogida resto y fracción orgánica, cuya apertura estará limitada a determinados días de la semana salvo ex-cepciones (pañales, etc), y su acceso a través de tarjetas personalizadas. Tarjetas que se adscriben a un domicilio pero con las que no se puede identificar a quién vive ahí en cumplimiento de la Ley de Protección de Datos.
A su vez las tasas de recuperación de la materia orgánica pasarán del 17,6% (2019) al 55% como ha ocurrido en las zonas con sistema de control de acceso. “El recurso que paralizó el proceso anterior ha supuesto un retraso de entre tres y cuatro meses. Una vez aprobada la ordenanza de residuos volveremos a lanzar el concurso para adjudicar las tarjetas. A lo mejor para diciembre lo logramos pero creemos que será más factible que esté para el próximo año”, expuso ayer el presidente David Campion. Para el próximo mes de marzo se quiere contar también con el anteproproyecto de la nueva planta de residuos (coste de 55 a 60 millones) cuya puesta en funcionamiento se prevé para 2023. Este año se plantea llevar adelante la licitación y adjudicación.
El Plan de Gestión Anual prevé, dentro de 2020, además del incremento de las cantidades de separación de “impropios” en cada una de las fracciones, la extensión de los puntos limpios rurales y contenedores de ropa. Con 170.000 euros la MCP se marca como meta disponer de las nuevas cocheras para la flota del transporte, “condicionado” a una compleja tramitación urbanística que depende de Pamplona. También pone como meta alcanzar los 41,6 millones de viajeros frente a los 40.639.355 en 2019. 620.280,53 euros, para la recarga telemática de las tarjetas de bus. - A.I.
