El Gobierno de Navarra mejorará la seguridad vial de una zona por la que cada día transitan 8.641 vehículos, según los datos del Plan de Aforos 2019. Lo hará gracias al desdoblamiento de 700 metros en la carretera NA-700, entre Orkoien y Arazuri, que enlazará mejor con la Ronda Norte gracias a la construcción de dos rotondas que vendrán a sustituir la actual intersección. Las glorietas se situarán antes y después del paso superior de la Ronda Oeste que cruza por encima esta carretera.

El Ejecutivo foral ha aprobado, en su sesión de hoy, la declaración urgente de la expropiación forzosa de los bienes y derechos afectados por estas obras. Con esta medida, que tiene un coste de 333.971 euros, se pretende agilizar los trámites de esta actuación, que supondrá un total de 2,6 millones de euros.

El consejero de Cohesión Territorial, Bernardo Ciriza, ha mantenido un encuentro con el alcalde de Orkoien, Carlos Arróniz, y el alcalde de la Cendea de Olza, Moisés Garjón, con objeto de abordar los detalles de esta iniciativa. En este encuentro han participado también el director general de Obras Públicas e Infraestructuras, Pedro López; la concejala de Urbanismo del Ayuntamiento de la Cendea de Olza, Amaia López de Ipiña, así como la técnica municipal del Ayuntamiento de Orkoien, Beatriz Gatesi.

Desde Obras Públicas se ultima la actualización del proyecto, que fue aprobado definitivamente en el año 2010, al objeto de adaptarlo a la nueva normativa, revisar los servicios afectados, así como actualizar los precios, dado el tiempo transcurrido desde su aprobación. Está previsto que a lo largo del mes de junio se puedan licitar las obras.

Calzada con barrera y dos direcciones

La seguridad se verá aumentada, en primer lugar, gracias al desdoblamiento de los 700 metros de la carretera NA-700 que discurren entre la glorieta cerrada situada al final de la variante de Orkoien y el enlace de la Ronda Oeste. La actuación contempla que la calzada actual de dos direcciones sea sustituida por una calzada desdoblada con direcciones de tráfico separadas por una barrera física, donde no exista la posibilidad de choque frontal entre vehículos. Para ello se ha proyectado una doble calzada de 7 metros con arcenes exteriores de 2,50 metros e interiores de 1 metro, en los que se instalará una barrera de hormigón doble.

En segundo lugar, se contempla la sustitución de la actual intersección en T de la carretera NA-700 con la Ronda Oeste por dos glorietas cerradas de enlace que permitirán la realización de todos los movimientos. De esta manera se elimina el riego de choque frontal y se disminuye la gravedad de los accidentes que se puedan producir, debido a la baja velocidad necesaria para circular por ellas. Ambas glorietas contarán con una anchura de calzada de 9,50 metros y arcenes de 2,5 metros. La isleta central tendrá una acera de 3 metros que resguardará la zona interior que se proyecta ajardinada.

Además, con el fin de reforzar la seguridad en la zona de las rotondas, se ha proyectado una nueva instalación de alumbrado en las dos nuevas glorietas, al objeto de mejorar la visibilidad y la percepción de que se llega a una nueva intersección y que se debe, por lo tanto, reducir la velocidad. La calzada de unión de las dos glorietas contará asimismo con cuatro carriles, distribuidos en dos calzadas de 7 metros cada una, con barrera de hormigón de separación en la mediana.