Estella inauguró ayer el nuevo Centro de Interpretación de la Ciudad Est(r)ella-(L)Izarra. Dos plantas diseñadas dentro del antiguo ayuntamiento para albergar y divulgar la historia y el patrimonio material e inmaterial de la ciudad y que contó con una inversión de más de 100.000 euros.

Fernando Cañada ha llevado la dirección técnica y la coordinación del proyecto y aseguró que la idea es “conocer Estella desde distintos puntos de vista”. El aspecto gráfico llama la atención desde el comienzo de la visita, donde ya en la primera planta se puede ver una recorrido visual de la ciudad desde sus orígenes hasta la denominada ciudad contemporánea. Aquí está la sala audiovisual que cuenta con una pantalla panorámica en la que se proyecta un cortometraje que recoge los primeros vestigios de la ciudad en la edad del bronce o del Hierro. Habla también de los orígenes de Lizarra y de la fundación de Estella en 1076. El audiovisual avanza a través de la historia por los periodos de guerras; pestes como la de 1328 en la que la ciudad perdió dos terceras partes de su población o de catástrofes como la del año 1.475 en el que una riada anegó la ciudad. Los siglos posteriores hablan de la ampliación de la ciudad que tras un convulso siglo XIX repleto de guerras llegó a su crecimiento con el auge industrial en la segunda mitad del Siglo XX.

La segunda planta cuenta con dos espacios. Uno multidisciplinar, en el que a través de material gráfico y audiovisual se recoge, en opinión de Roberto Ciganda, comisionado científico del proyecto, la ciudad en cinco ámbitos diferenciados. Una Estella que fue evolucionando por aspectos claves como el Camino de Santiago, su vigor comercial, la multiculturalidad de sus habitantes a lo largo de la historia, la parte administrativa y militar como cabeza de la Merindad y la Estella vivida tanto por sus habitantes “como por quienes la visitaron y dejaron huella”. En esta misma planta hay un espacio que, para Ciganda, es como “la guinda final”: la sala dedicada al Fuero de Estella otorgado por Sancho VI en el año 1.164, en la que se puede ver una copia en tamaño real del pergamino que cuenta con 4,5 metros de longitud y que puede ser desenrollado físicamente por los visitantes que lo deseen.

La presentación del acto corrió a cargo del concejal de Cultura, Regino Etxabe, quien destacó la aportación a la idea inicial del profesor estellés Toño Ros, y agradeció el trabajo de todos los concejales de las dos últimas legislaturas “este proyecto es el ejemplo de que es posible el trabajo en común, una obra colectiva que ha permitido pensar en clave de ciudad y donde se ha llegado a un acuerdo entre diferentes”. Uno de los organismos más vinculados a este proyecto ha sido el Centro de Estudios de Tierra Estella, cuya presidenta, Merche Osés, describió el centro como “un punto de encuentro y de partida para conocer la ciudad”. Osés también ha participado en la elaboración de los contenidos junto con Toño Ros, Txemi Legarda, Javier Iturbide, Román Felones, Mikel Ramos, Eloisa Ramírez, Fermín Miranda y Félix Segura.

Por último, el alcalde Koldo Leoz, aseguró que este proyecto nace de la necesidad de dar a conocer nuestros ricos patrimonios material e inmaterial. Solo conociendo y comprendiendo nuestra historia seremos capaces de respetar y amar a Estella-Lizarra”.