Olite - Erriberri prendió este viernes, 13 de septiembre, la última mecha del calendario festivo de la Zona Media de Navarra; una mecha que por motivos desconocidos no pudo salir del soporte y explotó en el mismo balcón de la casa consistorial. Tanto el Alcalde, Josu Etxarri, como desde la pirotecnia Fiesta, coincidían que el artefacto no tenía ningún defecto y que probablemente el incidente fue debido a “un error humano”. Un susto importante, sin duda alguna, para todas las personas que se habían congregado para presenciar el inicio de la fiesta además de apoyar también a Carlos Ardanaz El Puma, el gran protagonista del día, como lanzador del cohete. Carlos, que el día anterior había recibido de manos del alcalde, Josu Etxarri, un pañuelico de honor al mérito deportivo por “la dedicación de toda su vida al fomento de la práctica de fútbol”, se mostraba “muy ilusionado y nada nervioso” minutos antes del gran momento. 

Arropado por su familia y amigos, Carlos exponía que se quedó “parado” cuando se enteró que iba a ser él quien lanzara el chupinazo, ya que “hubo mucha diferencia de votos con la segunda candidatura”. Además, únicamente tenía palabras de agradecimiento al Ayuntamiento por lo bien que se estaban portando con él y el apoyo recibido: “ayer en el homenaje estuvieron vendiendo camisetas de ANELA y se quedaron sin existencias”.

Carlos Ardanaz estuvo arropado por su familia durante el chupinazo. Unai Beroiz

Por otro lado, el Puma no quiso olvidarse de las reivindicaciones a favor de los enfermos de ELA: “Está por aquí Ramón Alzórriz, parlamentario y secretario de organización del PSN, y le he pedido una reunión para hablar con él y en el parlamento sobre la ley ELA. Necesitamos ayudas y no hay dinero”, exponía, mientras puntualizaba que hace unos días su mujer se encontraba enferma, con lumbago, y él no podía levantarse de la cama. “Llevo cotizando 40 años. Y así como yo he pagado todos los meses, si necesito ayuda, que me ayuden a mí. Cuando me decían “paga”, yo no me he opuesto nunca. No quiero dinero, quiero ayuda para mi mujer, para vivir. Morir, ya elegiré yo morir dignamente. Pero vivir, también quiero vivir lo que me queda de una manera digna. No quiero vivir por los suelos y que mi mujer esté arrastrándose por ahí”, manifestaba.

Más incidentes

Previo al cohete, el día ya había comenzado con incidentes, puesto que “varios vecinos” del pueblo llamaron en numerosas ocasiones por teléfono a miembros del Equipo de Gobierno quejándose de la presencia de ikurriñas y banderas Palestinas en la Plaza Carlos III. “El teniente de Alcalde, Jorge Bacaicoa, las ha retirado ante la insistencia de este grupo de vecinos”, explicaba Josu Etxarri. El propio alcalde, a su vez, explicaba que el presupuesto, de aproximadamente 180.000 euros, se ha visto modificado al alza debido a la implementación de la plaza de toros. “Que dios nos coja confesados. La plaza ahí está. Yo como alcalde dije que con su colocación dábamos dos pasos hacia atrás y lo sigo pensando. Es lo que salió por mayoría y la democracia hay que respetarla, aunque creo que el año que viene no se pondrá. Tendrá éxito un día. Pero ya digo que, más que ganancias, todo van a ser pérdidas. Cuando se acaben las fiestas veremos cómo sale la cosa”, aseguraba Josu. 

En la misma línea se mostraban miembros de la plataforma Erriberriko Oihua, una asociación asamblearia sin ánimo de lucro, del pueblo y para el pueblo e impulsores de las txoznas en la localidad. “Buscamos darle una alternativa al pueblo, con cosas que el ayuntamiento no prepara, para la gente de Olite que no le gusta lo que hay. La plaza de toros, por ejemplo, vemos que no sirve para nada. Habrá gente que le guste, pero no creemos que sea algo que demande la gente joven como dice la concejala de festejos. No vemos ningún sentido tenerla cuando nunca ha sido rentable ni la gente iba”, atajaban.

Tras el cohete, la juventud se fue de ronda con la Txaranga Malatxo. Unai Beroiz

Bailes y buen ambiente en el primer día de fiestas. Unai Beroiz