Pamplona - Un grupo de vecinas y vecinas del Casco Viejo se reunió ayer para denunciar la presencia de heroína en algunas zonas del barrio y los correspondientes problemas de convivencia que genera. La comparecencia, convocada bajo el mensaje Fuera heroína de nuestras calles. Contra la degradación del barrio, tuvo lugar frente al número 13 de la calle Jarauta, donde se produjo la presunta agresión sexual grupal denunciada por una joven el pasado 8 de abril.

“El Casco Viejo es un barrio muy rico en movimientos asociativos, rico en espacios de ocio, rico en ideas innovadoras comunitarias, rico en movimiento, con diferentes personas de diferentes generaciones, orígenes culturales...”, subrayaron los convocantes. Una riqueza visible en la mesa informativa, en la que participaron “diversas personas de diferentes colectivos, vecinas, asociaciones de ocio, movimiento comunitario, peñas, comisión de fiestas” para poner de manifiesto su preocupación “por una dificultad de convivencia en determinados espacios y queremos solventar entre todas”.

En el comunicado, los vecinos señalaron que llevan desde noviembre reuniéndose para conservar “la riqueza que nos define y no tolerar actuaciones y espacios que fomenten la no convivencia”.

En este sentido, los convocantes censuraron las “amenazas, miedos, descuido de espacios públicos, suciedad, molestias a vecinas y aumento de la inseguridad” y consideraron que el detonante de la problemática está ligada “a espacios muy específicos, concentrados en ciertos bloques donde se observan funcionamientos y conductas cuanto menos dudosas”, entre las que destacaron la aparición de restos de jeringuillas en el huerto comunitario de Piparrika.

Ante esta problemática, los vecinos lanzaron varias preguntas, como de dónde sale la droga, si se esconde “algún interés en degradar un barrio lleno de movimiento social y popular” o por qué se demora tanto una solución,

“Por todos los motivos expuestos, consideramos necesaria la realización de una acción conjunta” en la que “se pretende contar con agentes sociales, colectivos con experiencia en este ámbito, servicios sociales de base y colectivos que trabajan en el ámbito del consumo de drogas, para que puedan guiarnos del modo más efectivo para buscar y llevar a cabo planteamientos para solucionar esta problemática”, concluyeron los y las vecinas. - D.N.