pamplona - Los responsables del diseño, dirección de obra y construcción de la pasarela del Labrit tienen un mes de plazo para hacer frente a la reclamación de 794.768 euros que el Ayuntamiento les impuso por los desperfectos hallados en la construcción.

La estructura permanece cerrada al paso peatonal desde el 5 de julio de 2016 por el desprendimiento de varias placas metálicas, lo que ha obligado a desmontar las partes más sensibles de la pasarela por razones de seguridad. El expediente administrativo se encuentra en su última fase que terminará con el desmantelamiento completo, tal y como establecía el informe elaborado por una consultoría independiente ante el deterioro de la pasarela y la inviabilidad de repararla.

El asunto fue tratado ayer en una reunión extraordinaria de la Junta de Gobierno Local, donde se informó del recurso contencioso administrativo presentado por Enrique Maya en representación de UPN en el que solicita al Juzgado de lo Contencioso Administrativo como medida cautelar “suspender la actuación municipal de desmontaje de la pasarela por la vía de hecho, ordenando al Ayuntamiento la paralización de cualquier actuación esté realizando al efecto por la vía de hecho”. Destacan en el argumentario que el desmontaje “por su propia naturaleza resulta irreversible” y que el Ayuntamiento está realizando “por la vía de hecho la destrucción de un bien de dominio público dedicado al servicio público”, e integrada “en el conjunto monumental de las Murallas de Pamplona”. El Ayuntamiento se personará y ha nombrado letrado y procurador. Este recurso se une al presentado por los responsables del proyecto (el diseño fue adjudicado por concurso al equipo constituido por Boreas Nuevas Tecnologías SL, Óscar Pérez Silanes, Carlos Pereda Iglesias e Ignacio Olite Lumbreras, mientras que la construcción la llevó a cabo Arian Construcción y Gestión de Infraestructuras SA y TEUSA).

En su recurso, solicitan al TAN la adopción de medidas cautelares que impidan el desmontaje de la pasarela y que se realice una prueba de carga en la estructura para determinar su resistencia, una opción que fue expresamente desaconsejada en el informe técnico encargado.

También se alude a un informe pericial elaborado por una aseguradora vinculada a los responsables de la obra en el que se descartaba “signos evidentes ni visibles de daños estructurales en la pasarela”.

Cabe recordar que en febrero de 2016 se produjo el desprendimiento de algunas chapas que conforman el cierre inferior de la pasarela. Tras recabar informes de los diferentes agentes de la obra, el Ayuntamiento encargó en junio de ese mismo año a la empresa externa Instituto Técnico de Materiales y Construcciones-INTEMAC la inspección y evaluación de la seguridad de la pasarela.

Este primer informe adelantaba que la pasarela presentaba daños debido a la corrosión excesiva del acero corten, no tenía capacidad para soportar las cargas para las que debía haber sido diseñada y ejecutada y apuntaba que había que tomar medidas de seguridad para evitar desprendimientos. Por ello, el Ayuntamiento colocó una red en septiembre de 2016. Teniendo en cuenta este informe, el Ayuntamiento abrió en 2016 y 2017 expedientes de depuración de responsabilidades donde se les dio audiencia a las partes implicadas.

informes Al existir divergencia entre el informe de INTEMAC y el presentado por el equipo redactor, el Ayuntamiento decidió solicitar uno nuevo a la consultoría de Estructuras de Ingeniería Civil y Edificación IDEAM, empresa neutral y sobre la que mostraron su acuerdo todas las partes implicadas. Su informe definitivo señalaba que la pasarela tiene una concepción estructural deficiente con aspectos como “falta de capacidad de resistencia; las cimentaciones no son rígidas y tienen desplazamiento horizontal; no se garantiza el empotramiento en el lado de la Media Luna y el diseño de un nudo central rígido no fue respetado en la construcción”. Las cinco alegaciones presentadas posteriormente por los autores de la pasarela también fueron desestimadas.

9 de febrero de 2016. Desprendimiento de dos placas metálicas.

5 de julio de 2016. Cierre definitivo de la pasarela.

Septiembre de 2016. El Ayuntamiento colocó una red y abre expedientes de depuración de responsabilidades.

28 de marzo de 2018. Se producen nuevos desprendimientos.

14 de junio de 2018. Dos ingenieros de una consultora independiente de Madrid -IDEAM- se trasladan a Pamplona para examinar la estructura.

12 de febrero de 2019. IDEAM entrega el informe en el que se aconseja la inmediata retirada.

30 de abril de 2019. Concluye el expediente de depuración de responsabilidades de la pasarela.

4 de abril de 2019. El Pleno aprueba que la pasarela del Labrit no se derribe sin que antes el Pleno apruebe eliminar el uso público.