pamplona - “No había manera de renovar el contrato y lo hacen solo por espacio de un año. Cobro 1.100 euros, pagaba hasta ahora 429 euros y, aunque pude renovar en noviembre, temo lo que pueda pasar porque ya nos han dicho que en la siguiente renovación no habrá subvención del Gobierno foral”, asegura Merche, con dos hijos a su cargo. Según explicó Noelia, muchos inquilinos tampoco pueden acceder a la ayuda del Gobierno denominada David porque está enfocada para rentas de menos de 650 euros. “Como la empresa sube los alquileres hasta 750 euros, o te vas, o te vas”, reitera quien convive con una hija. Elisabeth también firmó la prórroga en enero para un año. Entró con subvenciones del Gobierno foral pero “avisan que para la siguiente prórroga pierdes la subvención porque la vivienda pasa a tener tasación libre”. “Son viviendas que quieren pasar de clase A a clase B pero no se dan cuenta que todas las familias que vivimos aquí somos personas que han accedido a una vivienda de alquiler social, cumpliendo un baremo y unas condiciones, y que todas recibimos ayudas”, señalan. En esta misma calle en la web de Testa aparecen viviendas de una habitación desde 450 euros y de 555 con dos. En Marcelo Celayeta, con dos habitaciones, se ofertan desde 700 euros. También en las calles Remiro de Goñi, Paseo de Santa Lucía, Leonor de Aquitania y Paseo Sandua.

blackstone Testa Residencial, con más de 11.000 pisos en arrendamiento en todo el país, está participada por Blackstone, considerado el mayor fondo inmobiliario mundial. Este fondo estadounidense fue el principal beneficiado de la venta de viviendas sociales del Ayuntamiento de Madrid por la que fue condenada Ana Botella (PP). Testa es una de las cinco sociedades de inversión inmobiliaria (socimi) del fondo buitre. Blackstone adquirió la participación que tenía de Merlin Properties, BBVA y Santander. Se consideran estos fondos buitres uno de los principales causantes de la subida de los precios de alquiler en nuestro país.