- A sus 32 años, había conseguido levantar una empresa con media docena de empleados y las previsiones eran optimistas, con la vista puesta en la celebración de un campeonato nacional de gimnasia rítmica en el Navarra Arena entre el 22 y el 26 de abril.

Xabier Yárnoz Alfaro, Vinkoba Leotards, se dedica a la confección de material deportivo, concretamente mallas elásticas para gimnastas, y se le presentaba una oportunidad inmejorable para dar a conocer su empresa, que en sus 5 años de existencia ha conseguido que deportistas de la talla de Almudena Cid o varias gimnastas de la selección española utilicen el material elaborado en el pequeño taller que disponía en Beloso Alto.

El coronavirus acabó con el torneo de rítmica y con su empresa, que ha tenido que cerrar, pero como buen emprendedor no tardó mucho tiempo en ponerse a trabajar para encontrar la manera de ayudar ante la avalancha de necesidades que ya eran evidentes en la primera semana de confinamiento, aprovechando su conocimiento y sus contactos. "La principal demanda al principio fueron las mascarillas, pero su elaboración requiere un proceso técnico largo y muy complejo, por lo que lo descarté. Luego escuché que se necesitaban batas y que el Colegio Oficial de Enfermería había lanzado un llamamiento para la confección y distribución de batas de aislamiento para los profesionales sanitarios, y vi que ahí sí podía aportar porque es un sector que conozco bien".

Con la idea ya definida en su cabeza, puso en marcha un crowdfunding para adquirir los primeros materiales y comenzó a buscar voluntarios que le ayudaran a confeccionar los patrones de las batas de polipropileno, que otros voluntarios se encargarían de coser en sus domicilios, para finalmente ser entregadas al Gobierno de Navarra para su distribución.

En 24 horas logró 1.000 euros, que le permitieron adquirir, junto a una aportación personal, los primeros productos. "No tenía nada en el taller que pudiera utilizar ahora para elaborar las batas, pero con los distribuidores mayoristas con los que trabajo normalmente conseguí que me enviaran telas, hilos, agujas y gomas elásticas para los mangas a buen precio y en muy poco tiempo", comentó Xabier Yárnoz.

Para entonces, el equipo de voluntarios ya estaba organizado y con un patrón común diseñado para las batas, lo que les permitió ponerse en marcha en cuanto el primer cargamento llegó a Pamplona. En pocas horas ya estaban los distribuidores transportando los productos precisos al domicilio de cada voluntario, que además disponía de un vídeo elaborado por una de las promotoras de la iniciativa, la pamplonesa María Orduna, explicando paso a paso cómo debía ser la confección de la forma más rápida, en bloques, es decir, primero cosiendo todas las mangas, luego todo el cierre de manga y hombro, las tiras y el resto. Se aconsejaba además realizar una bata entera al principio para poder entender bien los patrones y todo el montaje que requería la tarea.

"Hicimos una división por 5 zonas con los voluntarios, 1 por cada repartidor. Todos los días se entrega material cortado y se recogen las batas hechas, por los que intentamos hacer una entrega de batas diaria, ya que lo importante en un primer momento fue la inmediatez y hacerlo con seguridad".

En esta iniciativa han tomado parte más de 100 voluntarios, entre corte, confección y recogedores, gracias a cuya labor han sido elaboradas 2.500 batas para el personal sanitario y asistencial de Navarra. Yárnoz comentó ayer que las previsiones indican que llegarán a las 3.000 antes de que acabe la semana, pero que las necesidades han ido disminuyendo conforme se ha incrementado el suministro de material y que van a parar la producción. Pese a ello, aseguró que la red se va a mantener operativa por si más adelante, según sea la evolución de la crisis, fuera necesario elaborar más batas u otros productos.

Quiso agradecer expresamente la aportación de la familia de La Algodonera y José Luis, de la empresa Alco de Bera, por el "grandísimo esfuerzo y trabajo que han hecho", y a "todas las personas que han hecho donaciones para la compra de material y a todas las personas que han querido apoyar a este movimiento prestando sus máquinas y sus manos para poder confeccionar estas batas". Entre los citados aparecen la familia Pérez Ágreda, María Orduna, Marga Calles, Sonia Royo, Leyre Tardío, Begoña Pires Paniagua, Marta Cusquillo, Esther Arteaga, Idoia Álvarez, Myriam Esparza, Julen Hernaiz, Irene García, María García, Edu Cerro, Begoña de Bilbao, Santiago Guerasim, Yolanda Aguado, Jacqueline Jiménez, Laura Montes, María José García, María Paz Albillar, Gloria Villanueva, Silvia Baiges, Sergio Sola, Maite Pueyo, Nancy Barreiro, Loli Justicia, Yolanda Perez, Sagrario Ibáñez, Ana Larreta, Ana Urtasun, Susana Bayarri, Arantxa Ayarra, Isabel Basterra, Carmen Cañabate, Beatriz Jiménez, Medina Atxutegui, Fidel Garrués, Isabel Basterra, Idoia Medina y Lidija Veronika.

"Tuve que cerrar mi empresa y me puse a buscar la forma de ayudar"

Empresario