- Un titular, una imagen. Las personas de casa, las de fuera, lo que ocurre en el hogar... "El momento que más recordaré estos días o lo primero que haré cuando pase". Con el objetivo de poner en valor los recuerdos y permitir a las familias que dejen constancia de su particular cuarentena, Labrit Patrimonio ha lanzado su Memoria de estar por casa/Etxeko egoteko memoria. Memoria de estar por casa/Etxeko egoteko memoriaSe trata de un cuaderno que permite, con una serie de propuestas, servir de testimonio, de historia, de evocación de todo lo que está sucediendo estos días de confinamiento para que no quede en el olvido. Para que las generaciones posteriores sepan cómo se sintieron los de casa, y los que ahora son niños puedan recordarlo, también, en el futuro.

"Queremos poner en común nuestra especialidad, que es hacer memoria y salvaguardarla, para que esté a disposición de cualquiera que quiera recordar esta cuarentena. Son preguntas abiertas, los recuerdos no son ni blancos ni negros. Lo bonito es que cada uno recoja su propia memoria o la memoria de la gente que le ha acompañado en estos días, como un muleta, un apoyo que le permita recordarlos después", señala Itziar Luri. En los cuatro primeros días de su lanzamiento, el pasado viernes, esta nueva herramienta -que se puede descargar en la web y en las redes sociales de Labrit Patrimonio- recibió 212 descargas.

El cuaderno, relata Luri, se puede rellenar de manera individual o colectiva, respondiendo a una serie de preguntas sobre nuevas formas de ocio y entretenimiento, cosas que uno pensaba no hacer y luego las ha hecho, qué cocinamos, cómo nos relacionamos o el momento favorito del día. "Nosotros somos cinco en casa y el otro día hicimos una carrera de canicas en el pasillo, con premio para el ganador. Ese ha sido mi momento, la foto con la que me quedo, porque es algo que de normal no hubiéramos hecho. Otros se acordarán del día que hicieron una videollamada con alguien, cada uno tiene su propia experiencia. Pero se trata de dejar constancia de todo eso para que dentro de 30 años, cuando les queramos contar a nuestros hijos cómo ha sido esto, que ya serán mayores, podamos hacerlo con facilidad", valora.

El proyecto, que se ha desarrollado de forma colectiva, ha sido también una manera para Labrit de adaptarse esta nueva situación que les ha tocado afrontar, ya que no es fácil cambiar de hábitos teniendo en cuenta que una de sus actividades principales, la de recopilar el patrimonio cultural inmaterial, pasa por recoger memoria oral acudiendo a diferentes localidades, clubes, asociaciones, y en el ámbito familiar. "Continuamos realizando el análisis de las entrevistas, que es un trabajo bastante intenso: al año realizamos entre 200 y 300. Pero hemos tenido que paralizar esas campañas de recopilación porque la media de edad de estas personas a las que preguntamos suele ser alta, y son población de riesgo. Somos conscientes además de que no sabemos cuantas de esas personas que pensábamos entrevistar, con sus testimonios, llegarán al final de esta situación, ni cómo será la vuelta o las medidas de protección que tendremos que tomar, porque para nosotros lo principal es cuidar a esas personas. Son nuestra razón de ser", señala.

Acudían también a residencias de ancianos, a sus domicilios€ "Seguro que a la vuelta habrá cierta prevención respecto a las relaciones, pero también creemos que ahora va a tener más sentido que nunca nuestra actividad. Ahora que hemos sido conscientes de lo que es no poder hablar, no poder estar con los nuestros, va a tener más sentido para una persona dejar su testimonio vital, no sólo durante una cuarentena sino a lo largo de la vida", explica.

Y es que se trata de testimonios que, al fin y al cabo, suponen un legado que uno deja para las generaciones posteriores, el paso de una vida y todo lo que ello conlleva. "Yo, por ejemplo, no pienso tanto en mi generación como en la siguiente, que probablemente no haya tenido ocasión de convivir con esa primera generación y tenga más necesidad de conocer maneras de pensar y unos modos de vida que habrán cambiado mucho, probablemente, para cuando mis hijos sean adultos. Creo que ahora es cuando más sentido adquiere el hecho de dejar esas vivencias".

"Ahora va a tener más sentido que nunca nuestra actividad"

Labrit Patrimonio