- Gerencia de Urbanismo conoció ayer el detalle del anteproyecto de Plan Especial para el II Ensanche que recoge propuestas, ideas, sugerencias y alternativas para posibles desarrollos urbanísticos en ese barrio pamplonés. El PEAU describen las actuaciones en base a ocho áreas del Ensanche: en torno de la antigua estación de autobuses (calles Arrieta y Paulino Caballero); entorno de la calle Teobaldos - Plaza de Toros - Parque de la Media Luna se establecen ocho ámbitos de actuación; ejes de transformación (avenida Baja Navarra y calle San Fermín); entorno de la calle Olite y plaza Blanca de Navarra; entorno de Media Luna - Valle de Roncal; entorno de la plaza de la Cruz; entorno de la plaza de la Libertad - avenida Juan Pablo II; y bordes calle Aoiz - calle Monjardín. La manzana delimitada por las calles Olite, Gorriti, Aralar, Castillo de Maya y Plaza Blanca de Navarra se renovará para uso residencial con una ordenación alternativa a la edificación ya existente. El plan recoge que biblioteca y Civivox (el actual resulta insuficiente) son las principales carencias en materia de dotaciones del barrio. En este sentido, tras el proceso de participación se recoge que la propuesta en Salesianos no se ve clara como la mejor ubicación para el barrio. Como nuevas “áreas de oportunidad” se recogen la antigua estación de autobuses, Maristas, manza 276 junto a Plaza Blanca de Navarra, manzana del mercado, monumento a los Caídos y Plaza de la Libertad, y Misioneras. Según recoge el diagnóstico, el Segundo Ensanche se caracteriza por una población envejecida y con escasa capacidad reproductiva. Un 23% de las personas que viven en el barrio tiene más de 65 años y un 63,6% tiene la consideración de inactiva, ya que a esas personas mayores se une una fuerte presencia de menores de 15 años en la zona. El peso de la emigración es pequeño, un 7%, que ha ido en descenso en los últimos años. En comisión de Urbanismo se avanza también en el estudio para la propuesta de modificación de la normativa de habitabilidad en materia de vivienda que se quiere plantear al Gobierno para flexibilizar los criterios actuales. El parque residencial de viviendas se estima en unas 11.855, un 18% más que al inicio de la década. De ellas, poco más de 10.400 viviendas, un 89%, están destinadas a uso habitual. El parque de viviendas no utilizadas llega a las 1.000, un 8%. Esa oferta residencial es amplia y diversificada, en tamaño, tipo y precio de la vivienda, con entre 80 y 450 m2, pisos o viviendas unifamiliares, y con precios que pueden alcanzar hasta los 4.500 euros/m2. En cuanto al alquiler, existe una fuerte diversidad en la oferta, con viviendas entre 55 y 220 m2, con una renta media de 119,5 euros el metro cuadrado.