El Tribunal Administrativo de Navarra ha resuelto que la decisión del alcalde Enrique Maya (Navarra Suma) de suspender la charla Brecha orgásmica: de cómo el Patriarcado nos persigue hasta en la cama -que iba a celebrarse el pasado enero en la Casa de las Mujeres- “no se ajusta a derecho”. Fue una vecina la que, a nivel particular, presentó el recurso ante el tribunal, que señala que el alcalde tenía que haber informado de esa decisión y presentado un expediente. Desde el Ayuntamiento, que ayer avanzó que recurrirá la resolución, se escudan en que los trámites se realizaron “de manera verbal” pero, aunque así fuera, debía haber justificado la motivación de esa decisión.

“Me parece una alcaldada, una censura y una falta de respeto a las mujeres de Navarra, al feminismo y a la igualdad. Es inconcebible”, criticaba ayer Olga Artozki, licenciada en Derecho, que interpuso el recurso “para evitar que se quedara en un intercambio de tuits. Un alcalde no puede hacer eso, tendrá que explicar si hay una motivación, si ese motivo es legal y si favorece la igualdad y al interés general. Y si no cumple eso, hay una desviación de poder”.

El Ayuntamiento de Pamplona publicitó en su página web la programación de la charla, organizada por el área de Igualdad y que sería impartida por la experta en género Paola Damonti el 24 de enero de 2020 en la Casa de las Mujeres, dando difusión al evento. El 20 de enero un tuit de Vox en el que se criticaba a Navarra Suma o al Ayuntamiento de Pamplona por organizarla prendía la mecha del debate y, dos días después, la charla era suspendida. La propia ponente explicó entonces que el Ayuntamiento le informó de que le parecía “inadecuada” y le avisaron dos días antes de su celebración.

Ese mismo 22 de enero, Artozki presentó telemáticamente una queja al Ayuntamiento de Pamplona “mostrando mi indignación como vecina de la localidad y como usuaria de la Casa de las Mujeres, porque tenía pensado acudir a esta charla, y solicité expresamente que se me trasladara la motivación de tal decisión y la identidad del órgano que lo decidió”. Todavía está esperando la respuesta.

Denuncia que la actividad a la que tenía decidido acudir fue censurada y suspendida “por lo que parece más una decisión de un alcalde o los responsables de un área apoyándose en sus propias convicciones morales o en las de otros controvertidos grupos políticos”, y nada tuvo que ver con un acto administrativo conforme a Derecho y a los intereses generales que todo acto administrativo debe procurar. Además de por el marco normativo de la contratación pública, Artozki se pregunta si los actos de suspensión de la charla conllevan el cumplimiento de los objetivos municipales en el área de igualdad y del III Plan de Igualdad en vigor, y explica que son cuestiones que el Ayuntamiento debe esclarecer para defender la legalidad de su decisión.

. El Consistorio, en un principio, pide que no se admita el recurso escudándose en que “no existe un expediente escrito sobre las actuaciones municipales impugnadas”. Señala que no hay expediente administrativo sobre los acuerdos y, por lo tanto, “no hay acto de aprobación de la citada conferencia ni contratación de la conferenciante”. No envía el pertinente expediente pero el TAN le recuerda que, si realmente no hay constancia escrita de esas decisiones municipales, era obligación del Ayuntamiento expresar por escrito a este tribunal qué órgano u órganos tomaron tales decisiones, así como las razones aducidas para adoptarlas.

“En vez de proporcionar una explicación plausible y verosímil de lo sucedido el informe municipal intenta aferrarse a la inexistencia de constancia escrita sobre esas decisiones municipales”, esgrime el tribunal en su resolución. Pero los anuncios municipales -como el publicado en la cuenta municipal de Twitter, con membrete y escudo municipal, que anunciaba la charla en una infraestructura municipal con el área de Igualdad como entidad organizadora, que luego fue retirado- no surgen por generación espontánea. “Alguien del Ayuntamiento decide su inclusión y su retirada posterior, y alguien ejecuta esas decisiones”, valora.

Explica que el Ayuntamiento de Pamplona no aduce “ningún motivo” para su decisión de suspender la citada charla, por lo que “no cabe si no anular la decisión municipal, ya que existe plena certeza sobre la vulneración de la obligación de motivar los actos que limiten derechos subjetivos o intereses legítimos”. Por eso, es una actuación contraria a derecho.

Damonti, por su parte, hizo ayer una valoración positiva, ya que “quedó muy claro entonces que a la sociedad le pareció muy mal esa censura por parte del Ayuntamiento, lo cual ya es relevante, y esto ahora demuestra que legalmente tampoco está bien, que lo que hicieron no tenía sentido. No es la primera vez que este Ayuntamiento tiene reveses judiciales por decisiones que ha tomado de manera totalmente autónoma, sin respetar las leyes, y es también una demostración de que, por mucho que estén en el Gobierno, no pueden hacer lo que les da la gana: hay unos límites legales y hay que respetarlos”.

A nivel práctico, la resolución del TAN no obliga al Ayuntamiento a recontratar la charla, pero Damonti no tendría ningún problema en realizarla. “Si se volviera a contratar la charla lo entendería como una victoria para nosotras, aunque no quita toda la censura que hubo de antemano ni excusaría para nada el comportamiento del Ayuntamiento”, explicó.

A pesar del intento de veto, la charla se celebró finalmente en Katakrak días después, con aforo completo y decenas de personas a las que no les quedó más remedio que quedarse fuera, dado el éxito de la convocatoria. Ahí es nada.

‘Brecha orgásmica’. Es la diferencia entre en el número de orgasmos de hombres y mujeres en relaciones heterosexuales, siendo el de los hombres mucho mayor que el de las mujeres. Esta desigualdad conlleva la falsa presunción de que el placer para ellos es preeminente respecto del que corresponde a la mujer, que queda por ello cosificada sexualmente, deudora de otorgar placer sin procurar el propio.

En otros municipios. Tras lo sucedido, la charla se ha realizado en Estella, Tafalla, Villava, Ultzama y Urdax. En Villava, antes de que comenzara la pandemia, consiguió llenar la Casa de Cultura. El pasado viernes en Tafalla acudieron unas 70 personas.

Moción de EH Bildu, Geroa Bai y PSN para volver a programar la charla. Los grupos municipales sumaron ayer sus votos para aprobar una declaración en la Comisión de Asuntos Ciudadanos por la que piden al Gobierno municipal que vuelva a programar la charla. El texto reprueba “al Gobierno municipal de Navarra Suma por aplicar y respaldar la censura política a una charla sobre igualdad”, exige a las concejalas delegada y especial de Igualdad, María García Barberena y Cristina Martínez Dawe, que “aclaren públicamente quién tomó la decisión de censurar esta charla, a efectos de que se asuman las correspondientes responsabilidades políticas”, e insta al Gobierno “a cumplir la ordenanza de Igualdad”.

“Fue censura y falta de respeto a las mujeres, hubo desviación de poder”

Vecina que interpuso el recurso

“Quedó muy claro que a la sociedad le pareció mal, y ahora que no fue legal”

Ponente y experta en género