El Ayuntamiento de Pamplona ha excluido la posibilidad de que se construyan viviendas en la parcela de la avenida Zaragoza donde tiene previsto habilitar una gran superficie comercial, después de que el Gobierno de Navarra le obligara a paralizar el proyecto que estaba tramitando por carecer del proceso participativo que contempla la normativa urbanística.

En un tiempo récord, Navarra Suma ha elaborado un nuevo expediente, incluyendo el proceso de participación, pero no incorpora la opción de la vivienda y sólo se contemplan dos usos para el terreno: mantener el régimen actual o incorporar el uso de oficina como uso global.

La citada parcela se ubica en el límite entre Pamplona y Galar, colindante con el centro de atención animal y la nueva gasolinera que conecta la calle Sadar y la avenida de Navarra.

Tiene 59.467 metros cuadrados, de los cuales 9.600 irían destinados a acoger una gran superficie comercial a la que se oponen vecinos y comerciantes por el efecto que puede tener en el tejido social y productivo en los barrios más próximos -Azpilagaña, Milagrosa e Iturrama- y en el resto de la ciudad.

Se trata de la parcela que mencionó el alcalde Enrique Maya en la polémica entrevista de hace dos semanas, en la que aludió a los precios más caros del comercio local con respecto a las grandes superficies, declaraciones que tuvo que rectificar inmediatamente después tras las duras críticas de las 10 asociaciones de comerciantes de Pamplona.

En dicha entrevista, Maya citó esta parcela y descartó la construcción de una superficie comercial: "Ahí lo máximo que se está planteando es una superficie, como mucho, de 5.000 metros cuadrados construidos, que no es ni de lejos una gran superficie. Eso daría para un Mercadona o algo del estilo, no más" aseguró el alcalde.

Al margen de la firma comercial que decida instalarse en dicho terreno, Navarra Suma ya ha decidido que ahí no se construirán viviendas, como habían propuesto los grupos municipales de EH Bildu y Geroa Bai.

Estas dos formaciones ya han manifestado su opción al nuevo expediente, tal y como expusieron en la Gerencia de Urbanismo, al considerar que el proceso participativo incorporado debería contemplar la posibilidad de que vayan viviendas, como han solicitado las asociaciones de comerciantes de Pamplona ante el efecto que supondría una nueva zona comercial en la ciudad.

Durante el proyecto de tramitación del expediente, el Ayuntamiento recibió 3 alegaciones contra la construcción de esta nueva superficie comercial.

Fueron firmadas por la Asociación de Comerciantes de Navarra, que representa a 28 asociaciones con 1.700 establecimientos adheridos; Denok Bat, una federación compuesta por asociaciones de comercio y servicios de Pamplona y otras localidades; y de la Asociación de Comercio y Hostelería La Rotxa.