- ¿En qué proyecto debería estar trabajando ahora Pamplona para mejorar su competitividad desde el punto de vista arquitectónico?

-Desde el punto de vista de la arquitectura creo que sería interesante un proyecto estratégico, coherente y homogéneo, pensando en la ciudad que queremos. Pamplona tiene varios proyectos singulares que ayudarán a fortalecer su posición estratégica entre las ciudades de nuestro entorno y en Europa, objetivo de nuestra Estrategia Territorial. Es una ciudad referente en formación universitaria, atención sanitaria, celebración de congresos, recursos turísticos y patrimonio cultural... Todo ello asociado a espacios de gran valor arquitectónico. Además, es una ciudad conocida por la calidad de sus espacios libres, su urbanización, sus zonas verdes, con un Casco histórico peatonalizado y unos Ensanches en permanente mejora, así como con barrios con identidad y que son objeto de continua reflexión e inversión por parte de las administraciones. Todo ello también tiene una estrategia de diseño urbano que ha sido cuidada y que hoy es de manera más consciente, el eje de nuestro desarrollo. Tradicionalmente Pamplona se ha distinguido por la alta calidad media de sus edificaciones gracias a la influencia de la Escuela de Arquitectura. Los ciudadanos de Pamplona aprecian la buena Arquitectura y saben reconocer las virtudes de su ciudad y de los edificios que configuran el espacio urbano que constituye, en sí, el valor singular de Pamplona. Pero las decisiones tibias no ayudan. En Arquitectura el riesgo suele ser garantía de éxito, las medias tintas normalmente resultan ocasiones perdidas. Los arquitectos y arquitectas debemos ser quienes lideremos el diseño de la ciudad. Es necesario valorar el potencial de profesionales cualificados que tenemos en Navarra. Hace dos semanas se ha aprobado en el Consejo de Ministros la Ley de Calidad de la Arquitectura, tras el periodo de consulta pública de su anteproyecto lanzado en octubre del año pasado. Impulsada por el Consejo Superior de los Colegios de Arquitectos de España, establece el interés general de la Arquitectura para mejorar la calidad de vida de las personas. Con ella, además, se establece el marco jurídico para potenciar la calidad arquitectónica...Hay que tomar decisiones valientes, apoyándose en la alta capacitación de los arquitectos navarros.

¿Qué le resulta interesante de lo que están haciendo otras ciudades cercanas?

-Sin ir mucho más allá, en Logroño, están fomentando lo comentado en la pregunta anterior, con una inversión decidida que está siendo financiada en gran medida con fondos europeos. Tenemos que aprovechar la oportunidad que se nos presenta para realizar lo que en otra coyuntura resultaría inviable. Y en Vitoria se ha hecho bastante bien: en los últimos años han tenido muy presente que la salud de las personas está estrechamente ligada a la salud de sus ciudades y su entorno. Se adoptó la denominada Estrategia de Infraestructura Urbana Verde, lanzada en 2012, con objetivos marcados como la regeneración de áreas degradadas a través de técnicas de diseño ecológico, la mejora de la biodiversidad urbana, la mejora de la conectividad y la funcionalidad de diferentes zonas urbanas y periurbanas, la promoción del uso público de los espacios verdes, la eficiencia energética, el reciclaje y adaptación al cambio climático. Paralelamente se ha desarrollado un Plan de Movilidad Sostenible que pretende fomentar los modos de movilidad sostenible en detrimento del vehículo privado.

¿Qué haría con el monumento a los Caídos y su entorno urbano?

-Es un hito urbanístico, remate de Carlos III que no tiene ningún sentido derribar. Se trata de un edificio singular en un emplazamiento ideal que puede albergar usos dotacionales públicos de manera natural, lo que ayudaría a despolarizar el Ensanche y ayudaría a resurgir al comercio de inmediatez tan damnificado en la mitad superior. Utilizarlo desde ya, a la espera de su reconfiguración definitiva, facilitaría entender cómo puede ayudar a la ciudad. La actuación tan esperada debería servir para resolver ciertas cuestiones urbanísticas en todo el borde de la calle Aoiz y su conexión con Lezkairu, estableciendo correctamente flujos y relaciones entre ambas partes de la ciudad. La opción de albergar contenido cultural y artístico sería positiva para la zona y actuaría de nexo entre ellas.

¿Qué fortalezas y debilidades tienen barrios como Lezkairu o Erripagaña?

- Son barrios nuevos, todavía en construcción, con arquitectura de calidad y con tejido comercial que comienza a consolidarse y con una relación privilegiada con el Ensanche de Pamplona. Lezkairu tiene pendiente una conexión más fluida con éste. En Erripagaña no es tan evidente y resulta más compleja su resolución, si bien hay que conseguirla con un tratamiento adecuado de todo el frente alto de la meseta. Su debilidad es precisamente la necesidad de mejorar esas conexiones. Es necesario que el Ensanche esté abierto a esta zona de la ciudad. Para ello es necesario plantear aperturas como la que puede generarse al intervenir en los Caídos o el tratamiento del borde o de las conexiones a que obliga la topografía en esta parte de la ciudad, hacia el Soto. Es un punto clave, una decisión desafortunada puede hipotecar su futuro.

“Sería interesante un proyecto estratégico y coherente pensando en la ciudad que queremos”

“Vitoria ha logrado regenerar áreas degradadas con técnicas de diseño ecológico”

“Es necesario que el Ensanche esté abierto a los nuevos barrios como Lezkairu o Erripagaña”