sartaguda - La localidad ribera está inmersa en el cambio de buena parte del alumbrado público a tecnología led, una actuación que han podido llevar a cabo gracias a la ayuda del Plan de Infraestructuras Locales del Gobierno foral y que, prevén, estará acabada a lo largo de mayo.

En total, informaba el alcalde Paolo Albanese, van a sustituir 155 puntos lumínicos que ahora son de vapor de sodio y van a cambiar dos cuadros de luz, los que hay en la calle Barranco y en La Paz, que son muy antiguos y apenas cumplen las normas de seguridad.

La zona que se va a mejorar con nuevas farolas es la que va desde la calle Serrallo hasta La Paz, una parte del casco urbano que carece de buena iluminación. La idea, insistía Albanese, es mejorar la parte más cercana al cementerio, que está en la penumbra, y la zona junto a la bodega. De hecho, algunos vecinos ya han comenzado a notar la diferencia de la luz de las farolas y así lo han hecho saber.

El Consistorio adjudicó esta obra por 87.500 euros a la empresa Ekoargi que presentó una rebaja del 15% con respecto al precio de licitación, que era de 105.000 euros. Del precio final, el Ejecutivo pondrá el 60% y el resto lo afrontará el Ayuntamiento.

Las nuevas farolas son de 3.000 lúmenes, con más potencia que las actuales, y el color tira hacia el blanco.

notables mejoras En la actualidad, desvelaba el primer edil, el Consistorio paga unos 40.000 euros anuales en la factura de la luz y con este cambio prevén ahorrar unos 7.000 euros al año además del 60% de ahorro energético que supondrá.

Esta mejora, además, se verá complementada con el cambio de luminarias que ya han hecho en la casa de cultura con motivo de su reforma integral y con la reciente instalación de 22 módulos solares en las caras Sur y Este de la casa consistorial con el objetivo de generar y consumir parte de su propia energía eléctrica, acción que pretenden exportar a otros edificios públicos.

Sartaguda, por último, se acaba de sumar al Pacto de los Alcaldes para el Clima y la Energía, un acuerdo con el que se comprometen, entre otras cuestiones, a reducir las emisiones del CO2 o a presentar un plan de acción para el clima y la energía renovable en dos años.