- La crisis del coronavirus y las medidas sanitarias de la nueva normalidad también han obligado a suspender la presentación anual de los niños y niñas a San Miguel de Aralar, un acto organizado por la Cofradía de San Miguel de Aralar que busca estrechar los lazos con el santuario desde la infancia. La cita era el 19 de julio y ya había txikis inscritos, a quienes se comunicará si es posible celebrar este entrañable acto en otra fecha, según apunta José Mari Ustarroz, presidente de la cofradía. “De lo contrario se pasaría a al próximo año”, observa.

Lo cierto es que este acto venía sucediéndose desde 2004 con fecha fija, el domingo siguiente a Sanfermines, ante la imposibilidad de realizar bautizos en santuario porque este sacramento se debe ofrecer en las parroquias. Desde entonces, cientos de niños y niñas son amigos del Ángel de Aralar, una gran cuadrilla unida por la tradición y devoción al Ángel de Aralar.