- Pinceles, lienzos y la alegría del arte vuelve a colgar de los balcones de Sangüesa. Desde el viernes, el día elegido para la apertura de la sexta edición de Arte al Cuadrado iniciativa que el colectivo local de artistas "Quiero molarte" puso en marcha en la ciudad hace siete veranos para colorear y dar vida a sus calles.

De carácter totalmente abierto a la participación, desde la primera edición se sumó a este objetivo principal otro grupo que trabaja en el día a día de Sangüesa, son usuarios y usuarias del centro ocupacional de Tasubinsa, con el afán de tomar parte y visibilizar el trabajo de la discapacidad intelectual en la sociedad.

Para el grupo de 26 personas subir al balcón del ayuntamiento a colocar sus lienzos, eso sí, este año con mascarillas ha sido la primera actividad exterior tras la crisis del coronavirus.

Esta iniciativa de alegrar y ofrecer una imagen fresca y diferente de Sangüesa durante los meses estivales se estrenó como una auténtica fiesta de participación y creatividad vecinal en la que, verano a verano, se fueron sumando las obras de muchas personas con ganas de mostrar el artista que llevan dentro. Para participar bastaba con recoger las telas (gentileza de Kol, S.L) en la tienda de Elena Carlos, "Lo que yo hago", y tenerlas listas para el día señalado.

Tras un paréntesis, el año pasado se interrumpió, la pandemia ha traído el proyecto de vuelta. "Ha sido tal vez consecuencia del confinamiento. Este año era más necesario dar alegría a la calle y al pueblo", expresa Elena Carlos del colectivo impulsor, al tiempo que admite que la participación ha sido menor. Y es que "lo hemos preparado solo en un mes. Otros años lo ofertábamos desde Semana Santa", recalca.

Con esta premura, recibieron el aviso en el centro de Tasubinsa. La actividad tiene un gran significado allí. "Que cuenten con nosotros para alegrar la ciudad es importante y estar presentes en el balcón más grande y céntrico de la calle Mayor hace que se sientan bien y que durante el verano puedan llevar a los suyos a ver su trabajo y presumir de ello como cualquier otra persona", expresa Laura Pérez, monitora en el centro ocupacional desde hace 15 años.

En esta ocasión el colectivo ha querido reflejar en sus tres lienzos la solidaridad vecinal vivida durante el confinamiento. "Lo hemos hecho más deprisa, con menos colores, y como siempre con mucho trabajo detrás, que se compensa con la ilusión de salir y participar", reconocía Laura. La monitora se ha ocupado de que hubiera pincel para todos, en unos días en los que el centro ocupacional no se libra de la normativa sanitaria: higiene, mascarillas y distancia social. "Nos cuesta no poder abrazarnos, vivir un cúmulo de emociones y sentimientos, pero han interiorizado muy bien las normas y han trabajado con motivación. Hemos elegido un tema acorde con la situación que nos toca vivir, y la necesidad de amor y ayuda que todos necesitamos", expresa la monitora.

Este verano los lienzos están más repartidos. "Hay menos y cada vez son más las casas cerradas que nos impiden entrar a colgarlos", lamenta Elena. Permanecerán en los balcones hasta el 17 de septiembre, día en el que acabarían las fiestas, que en Sangüesa tampoco celebrarán.

"Después de lo vivido, este año hacía más falta dar alegría a las calles"

Colectivo Quiero Molarte

"Mostrar su trabajo entre todos los demás es muy importante"

Monitora del centro Tasubinsa