- El Raid del CIP FP Lumbier IIP, Irunberriko XVII Raid de Lumbier, que cada curso organiza el alumnado de segundo curso del grado superior de Animación y Enseñanza Deportiva se celebrará este jueves en el centro educativo y en el entorno de la localidad y cumplirá de esta manera su decimoséptima edición ininterrumpida. Se puede decir que el evento está de suerte porque ha pasado las posibles suspensiones de los dos últimos cursos como consecuencia de la covid-19. El pasado se desarrolló por fortuna días antes de la proclamación del estado de alarma y este lo hará dentro de tres días con protocolo covid.

De ello se han ocupado con afán la veintena de alumnos y alumnas que han cursado la especialidad. Se han volcado en su proyecto de fin de curso, (TFG) Trabajo de Fin de Grado, elaborado al detalle íntegramente en euskera y castellano: proyecto, protocolo, permisos e invitaciones.

Por ellos y ellas hablan Jaione Etxeberria Ancín, Aída Rodríguez Muñoz, coordinadoras generales del proyecto, y Ander Dufur Espelosín, responsable de comunicación.

El raid consiste en un encuentro competitivo y multideportivo que tiene al centro de Lumbier por anfitrión y al citado alumnado en la organización de una mañana compartida por 200 estudiantes de los centros que imparten la misma especialidad y participan, distribuidos en grupos, en varias pruebas deportivas combinadas. Sin embargo, la 17ª edición de 2021 se desarrollará el jueves "en familia", entre el alumnado del propio centro.

Son los inconvenientes de la pandemia a los que la organización ha sabido dar la vuelta y va por delante su satisfacción por el trabajo realizado y todo lo aprendido. "Hemos tenido que aprender a elaborar un protocolo y a modificar el evento para que sea seguro y garantizar la seguridad de participantes y voluntariado", recalcan con firmeza.

En el raid tomarán parte 42 personas repartidas en siete grupos, uno de profesores y 43 voluntarios estudiantes del centro que se ocuparán de marcar recorridos, velarán por la correcta ejecución de las pruebas e incluso, emplatarán el lunch de cierre.

El raid se compone de cuatro pruebas: ruta en bicicleta, bajada con piragua por el río Salazar, carrera de obstáculos en la pista de atletismo (prueba conquis y prueba de orientación. Los grupos estarán formados por cuatro personas divididos en dos para las diferentes pruebas, salvo la de orientación que será en equipo para encontrar a pie en un mapa cinco puntos de la localidad y alrededores.

"Aunque teníamos indicaciones de otras ediciones, hemos tenido que trabajar mucho para adaptar el raid a la covid, modificar el evento y estar pendientes día a día de la evolución de las cifras de la pandemia, para saber si podríamos llevarlo adelante o no". Aseguran que no descartaron la posibilidad de suspenderlo y ello habría afectado a su evaluación.

"Cancelarlo nos habría perjudicado porque es en la práctica donde vemos el resultado del trabajo teórico. Pero el hecho de que nos haya tocado gestionarlo con la crisis sanitaria lo hace más completo. Desarrollar las normas nos ha llevado a tener en cuenta absolutamente todo, hasta las botellas de agua del lunch, que tienen que ser individuales", apuntan Jaione y Aída.

La tarea repartida entre la veintena de alumnos y alumnas de la clase de segundo les ha llevado a diseñar los grupos de: finanzas, premios y promociones, permisos, participantes y voluntariado, organización de pruebas, comunicación y redes sociales.

Poner en práctica lo aprendido y enfocarlo en el futuro al mundo laboral es el objetivo del evento. A sus 20 años cumplidos, reconocen que es un impulso importante. "Nos prepara para gestionar y para trabajar en equipo". Se consideran afortunados por haber accedido a este grado con alta demanda. "Hemos recibido enseñanza pública y en euskera, con muchas dinámicas y ventajas como disfrutar de este entorno natural privilegiado, cerca de nuestras casas en Burlada y Pamplona. Nuestra valoración es muy positiva", recalcan, al tiempo que agradecen al instituto el apoyo para realizar el raid a pesar de todo.

El proyecto de fin de curso ha sido supervisado por el profesor Aitor Mozo y la profesora, Amaia Elósegui, quienes mostraron su satisfacción por cómo han llevado a cabo todo el proceso. Asimismo, se llevan el visto bueno y buena nota de la dirección del centro. En su nombre, el jefe de estudios Carlos Chavarren significaba: "Les hemos felicitado por su esfuerzo dada la coyuntura, por lo bien que han planteado su trabajo y el protocolo desarrollado con detalle".

Únicamente lamentaba Chavarren el impedimento de invitar al alumnado del mismo grado de los centros de Tudela, Lecároz y Donostia. "Da pena no poder proyectar todo lo trabajado. El proceso de organización del proyecto es importante, pero lo fundamental es ejecutarlo", declaraba.

Después de darlo todo, celebrarán el objetivo cumplido con un lunch que reunirá e 140 personas. Inolvidable experiencia, sin duda, en el marco de un curso igualmente inolvidable.