Tudela - El plan Tudela Renove (segunda parte del Lourdes Renove) ha comenzado a dar sus primeros pasos en cuanto a las gestiones previas necesarias se refiere y antes de que comiencen las obras que no lo harán, en ningún caso, antes de los primeros meses de 2020. Así lo confirmó ayer el director general de Vivienda del Gobierno de Navarra, Eneko Larrarte, en su visita a Tudela en el marco de las jornadas de presentación del proyecto LC Districs de regeneración urbana.

Los cálculos del Gobierno de Navarra son que antes de final de año estén ya realizados los cinco Planes de Intervención Global (a falta de adjudicación) que marcan el Tudela Renove y que falta por adjudicar. “Empezaríamos entonces a movilizar los recursos y el proceso de contratación de los trabajos de los PIG”, explicó Larrarte, si bien no se empezarían todavía a ver máquinas en el Barrio de Lourdes.

De esta forma, antes de final de año sí se podrá saber en qué portales y en qué comunidades “los vecinos están por la labor de poder intervenir y se focalizarían así los esfuerzos hacia allí”. De hecho, algunas de las propuestas que se han presentado a licitación para llevar a cabo los PIG han mantenido ya reuniones con los vecinos y al parecer “hay buena predisposición por parte de algunos para unirse a este proceso de rehabilitación”.

Precisamente, el éxito del anterior plan de rehabilitación de esta zona es el que ha llevado al Gobierno de Navarra a mostrar la forma de trabajar, con la creación de una oficina en el propio barrio para atender y asesorar a los vecinos. Como explicó Larrarte, “el modelo que se plantea es el de la metodología a través de la cual se puede lograr movilizar más recursos gracias a la cercanía”. De esta forma, desde hace algún tiempo está abierta la oficina de Nasuvinsa en la calle Estanca del Barrio de Lourdes donde “personal de Nasuvinsa, del Ayuntamiento de Tudela y una trabajadora social acompañan en ese proceso. Es una actuación que tiene que ver con el Urbanismo del ladrillo pero también con lo social”, concluyó el director general de Vivienda.

Los cinco lotes que salieron a licitación son: Actuación en bloques de vivienda Años 50 y entorno (5.000 euros); Bloques de vivienda tipo Torres y entorno (8.000 euros); Bloques de vivienda avenida de Santa Ana y calle Escarcha y entorno (10.000 euros); Bloques de vivienda Scalextric D y E, calle Frontón y calle Almenara (13.000 euros) y por último Bloques de viviendas de plaza Padre Lasa y entorno (39.000 euros).

Entre los bloques es especialmente relevante la intención de actuar en el marco del entorno de la plaza del padre Lasa, más allá de las viviendas que rodean el parque. La zona de intervención tiene una extensión de 8.200 m2 y el presupuesto estimado de las obras (que no del proyecto) de unos 695.000 euros. Con este proyecto se busca regenerar y acondicionar un espacio urbano que ha quedado “obsoleto y en parte en desuso”, según destaca el pliego, a pesar de su emplazamiento y dimensiones. La intervención conllevará “un nuevo diseño y reurbanización que mejore la articulación de la plaza con su entorno, en particular con la Avenida del Barrio”.