a no continuidad de las excavaciones en la iglesia de San Nicolás, el maltrato al euskera o la prohibición de música en la calle, fueron algunas de las críticas que realizaron en la tarde-noche del pasado sábado los personajes del Paloteado del Casco Antiguo de Tudela en su regreso a escena tras un año de inevitable parón debido a la pandemia del covid-19.

También hubo tiempo para reclamar mejoras en el Casco Histórico de la ciudad, como más plazas de aparcamiento, el arreglo de las casas abandonadas, la mejora del Cerro de Santa Bárbara, buscarle un uso a la antigua iglesia de la plaza de los Fueros o que se acometa de una vez por todas el derribo del edificio de Bodegas Tudelanas, ubicado en el Paseo del Castillo y que se encuentra fuera de ordenación urbana, según la normativa del PEPRI (Plan Especial de Protección y Reforma Interior del Casco Antiguo).

Tampoco se olvidaron de elogiar a aquellas personas o colectivos que han destacado por sus acciones durante el último año, como el pintor César Ridruejo que ha llenado el Paseo de Prado y sus árboles de animales o el Lourdes femenino que sigue impulsando con fuerza el fútbol femenino en la capital ribera.

MUCHOS PALOS Las críticas al equipo de gobierno del Ayuntamiento de Tudela, liderado por el alcalde Alejandro Toquero, no se hicieron esperar y llegaron nada más dar comienzo el espectáculo que, en esta ocasión, fue más corto de lo habitual y se celebró en el patio del colegio público Elvira España, con un aforo limitado a 400 personas, para preservar la seguridad de participantes y espectadores.

Así, antes de que entraran en escena los personajes del Paloteado del Casco Antiguo: Mayoral (Julio Ruiz Carcavilla), Rabadán (Jesús Villarroya Anguiano), Zipotero (David Jiménez Ayllón), Cierzo (Santi Muela Caraset), Bardena (Inma Benítez Sesma) y Vecino (Carlos Gil Peña), las dantzaris se pusieron a bailar sin música sobre el escenario recordando que la aprobación de la Ordenanza Municipal sobre Conductas Cívicas prohíbe tocar en las calles de Tudela. Finalmente, el Mayoral dijo que tenía permiso del alcalde y los gaiteros pusieron música al acto.

Sobre este asunto volvió a incidir el Cierzo con el Paloteado ya avanzado. “Y no solamente están los gaiteros en el ajo, sino muchos más artistas que se han quedado sin trabajo y a los que el Ayuntamiento pone mil dificultades para que puedan tocar, por lo menos en las calles”. El Mayoral excusó al equipo de gobierno diciendo que todo se debía al covid, a lo que el Cierzo respondió que no era así. “No te empeñes que no cuela. Que antes de llegar el virus ya sacaron la tijera y prohibieron conciertos y otros actos culturales que vinieran de estamentos que no fueran oficiales”. A esta crítica se sumó también Bardena, al señalar que “no entiendo a quién perjudican tales actos, que en verdad en todo caso enriquecen la vida de la ciudad”.

Bardena fue también quien reclamó al alcalde de Tudela, que se encontraba entre el público, que no elimine los talleres arqueológicos en la iglesia de San Nicolás. “¿Excavar o no excavar? He ahí el dilema. ¿Enterrar las calaveras a la vez que el pasado o gastarse algunos cuartos en acabar los trabajos? Salvemos San Nicolás, hagámoslo mano a mano, que las puertas que abre un rey no nos las cierre un villano”, aseguró con una calavera en la mano.

DEFENSA DEL EUSKERA Las críticas a Toquero no le llegaron única y exclusivamente de los personajes del Paloteado, ya que en esta edición las dantzaris también tomaron la palabra para denunciar que el Ayuntamiento de Tudela maltrata a los vascoparlantes, discrimina a los euskaltzales. “También han omitido nuestro idioma una vez más. Con la excusa del bilingüismo la riqueza de Navarra, atrás”.

A este respecto, le recordaron el “olvido” del euskera en el cartel de prevención contra la violencia de género elaborado por la concejalía de Bienestar Social con motivo de las celebraciones del pasado 25N. “Lau hizkuntzetan argitaratutako kartela. Gaztelera, ingelesa, frantzesa eta arabiera, gurea aldiz, ez da atera (Un cartel publicado en cuatro idiomas, español, inglés, francés y árabe, mientras que el nuestro no está publicado)”. Precisamente, en estos cuatro idiomas lanzaron un mensaje reivindicativo las dantzaris “Por una Ribera diversa, somos cultura”.

El Mayoral no quiso finalizar el Paloteado sin recordar a todas aquellas personas que han fallecido durante la crisis sanitaria. “No queremos despedirnos sin tener un pensamiento para todas las personas que nos miran desde el Cielo” concluyó.

Pedro González. El Rabadán atizó al concejal de Educación y parlamentario de Navarra Suma por señalar en su día que la ministra de Igualdad, Irene Montero, “está ahí por ser la pareja del ‘macho alfa’”. “Que pa’ ser de Educación y llevar siempre corbata los comentarios que salen de su boca cuando habla son del mismo nivelón del bicho que come alfalfa”.

Fernando Ferrer. Tampoco se libró de las críticas el presidente de la Mancomunidad de Residuos de la Ribera por su gestión en la adjudicación del contrato de la limpieza viaria. “Si el propio nombre lo dice en la ‘mancomunidá’ uno da pa lo que da”, señaló el Zipotero.

Zeus Pérez. El único que recibió elogios por su trabajo en el Ayuntamiento fue el edil de Urbanismo, aunque al Rabadán no le quedara muy claro. “Pero a ver... que no me entero; ¿de qué Zeus estáis hablando? que yo soy mucho cortico y me estáis embolicando porque dios no hay más que uno y es Toquero, el Alejandro”.