Más de 1.100 tudelanos y tudelanas han pedido con su firma al alcalde de Tudela, Alejandro Toquero que no cierre las excavaciones de la iglesia de San Nicolás en lo que se considera la última campaña y la que sería más importante para elaborar el informe definitivo sobre lo que se ha encontrado a lo largo de siete años de trabajos arqueológicos. Así lo reclamaron ayer un grupo de los más de 100 voluntarios que desde 2014 han trabajado pagando en recuperar el pasado de la ciudad bajo los cimientos de este templo del siglo XII y que en apenas 15 días han llegado a recoger 1.160 firmas.Cuatro de estos voluntarios, Marí Cruz Pérez, Elena Flamarique, Laura Gascón y José Luis Armendáriz destacaron ayer que el equipo de gobierno de Navarra Suma no ha dado “ni una razón sólida que sostenga su decisión”. En su intervención pusieron en valor lo encontrado, lo que supone turística y culturalmente para la ciudad, cómo ha difundido el conocimiento de la misma y cómo se ha convertido en una escuela de futuros arqueólogos que han pasado tan importantes como algunos que han participado en el descubrimiento del hombre de Loizu, el hallazgo más importante de las últimas décadas.
Los voluntarios acusaron a Alejandro Toquero y a la concejala Erika Navarro de hacer “interpretaciones sesgadas” para justificar el cierre como decir que “tiran los huesos al güesario del cementerio”. Según señalaron “evidencian una ignorancia absoluta de la práctica arqueológica de esta actividad municipal porque pretenden convertir en una razón ficticia para justificar el cierre de los talleres. Solo sirven para sembrar confusión”. Por este motivo también explicaron que “los huesos que se llevan al osario (no güesario) son los que salen de relleno, mezclados, que no aportan información. Pero los que salen con conexión anatómica, se excavan, limpian uno a uno, se dejan secar y se introducen en bolsitas etiquetadas. Así hasta los más de 250 cuerpos exhumados”.
Estas explicaciones de los voluntarios surgieron ante las afirmaciones de la concejala de Centros Cívicos de que “actualmente no hay ni uno solo de esos objetos catalogados, como exige la ley”, algo que negaron categóricamente. “Están mintiendo”. De hecho apuntaron que “se entregan al Gobierno de Navarra donde ya se encuentran 185 de estos enterramientos, cada uno por separado”.
Los voluntarios apuntaron que van a seguir con movilizaciones durante este mes de julio ya que los talleres deberían empezar en el mes de agosto, “existe financiación del Gobierno de Navarra que asume prácticamente la mitad del coste anual de los talleres”, lo que significa que al Ayuntamiento este último taller costaría 3.500 euros. Además Príncipe de Viana ha dado ya la autorización para las excavaciones y no ha recibido aún noticia de la negativa del Ayuntamiento a seguir con las mismas.
En San Nicolás se han sacado más de 250 enterramientos, estructuras cristianas (una iglesia tardogótica de cuya existencia no había noticia), e islámicas así como ajuares, monedas, anillos, objetos cotidianos y religiosos “que taller tras taller presentaban en exitosas ruedas de prensa los diferentes ayuntamientos”. Además el hallazgo de enterramientos de cuerpos bocabajo sirvió para que escolares del IES Valle del Ebro realizaran un exitoso trabajo que se difundió por todo el país.
En la rueda de prensa de ayer señalaron que la decisión de Toquero solo se entiende “desde un análisis erróneo, precipitado y parcial de los datos disponibles, porque a la luz de la verdad es imposible”. Dentro de sus proyectos han diseñado ya algunas acciones “populares, abiertas y gratuitas”, con las que esperan celebrar la vuelta de los Talleres Arqueológicos”.
En todos estos años las visitas guiadas y teatralizadas, charlas o conferencias han dado a conocer la ciudad más allá de sus fronteras por lo que esperan de Toquero “la flexibilidad propia del primer edil más joven de la ciudad” y “altura de miras” para que sea un “gobernante digno del siglo XXI, no solo en lo relativo al manejo de nuevas tecnologías sino en la aplicación de buenas prácticas de gobernanza”.
