tafalla - En una mañana ventosa aunque agradable para disfrutar de los rayos solares de esta época primaveral, varias decenas de vecinos de Tafalla acudieron en la jornada de ayer en romería hasta la ermita de San Gregorio, ubicada a poco más de 3 kilómetros de la ciudad en el término municipal de Barranquiel. Como se viene sucediendo, el acto principal de esta jornada lo constituyó la celebración de una eucaristía que dio comienzo a las 11 de la mañana en el interior de la ermita, posteriormente se procedió a la bendición de los campos y después todos los asistentes fueron obsequiados por el consistorio tafallés con unos vasos de arrozada repartidos por un grupo de voluntarios de la Asamblea local de Cruz Roja.

Gran parte de los participantes acudieron hasta la ermita caminando, después de reunirse a las 10.15 horas en el atrio de la iglesia de Santa María. Entre ellos predominaba el público infantil acompañado de sus progenitores y fieles que mantienen la devoción. La eucaristía estuvo oficiada por el párroco Iñigo Beunza y contó con participación, en las lecturas y en las ofrendas, de varios de los niños y niñas que estos dos próximos domingos recibirán su Primera Comunión. Finalizada la misa, el sacerdote realizó la bendición de los campos pidiendo la intercesión de San Gregorio para unas buenas cosechas.

Para completar la mañana los asistentes disfrutaron de los almuerzos, reuniéndose por grupos de familias o de amigos y después pasaron a degustar la arrozada que cada año ofrece el Ayuntamiento. Entre los más pequeños también se repartieron latas de refresco. Este sabroso y dulce postre fue preparado por la cocinera Mari Carmen Ayestarán, empleando para ello unos 70 litros de leche, 10 kilos de arroz, 6 de azúcar, limón y canela. - C. Armendáriz.